Los chicos crecen y la princesita del pop no le escapa a la regla. Britney Spears, según pasan los años, tuvo que enfrentar problemas con distintas adicciones que le dejaron marcas en el cuerpo.
Quizás por eso, o por su cargada agenda de shows en Las Vegas, la ex chica Disney luce a sus 32 años un poco cansada, casi agotada se diría.
Al menos así la escracharon los paparazzi, en un paseo por Westwood Lake. En las imágenes se ve a la cantante sin maquillaje, con un look entre casual y juvenil, en sneakers, short y ensalada en mano.

Lo cierto es que Britney se sube tres veces por semana al escenario del Planet Hollywood para un recital de 90 minutos en el que baila y repasa con mímica una veintena de sus hits.
A ver, no se trata de hacer leña del árbol caído, porque cada uno acomoda el calendario como quiere y puede.
Es más cuando termine de cumplir con la serie de recitales en la ciudad del juego, Spears –según se calcula– va a recibir unos 30 millones de dólares por dos años. Y ahí, seguro, se compra el maquillaje que quiere..

