Los alrededores del parque Independencia evidenciaban, a la luz del sol de este jueves, destrozos y pintadas en los frentes de las casas y edificios, cuya autoría se le señala a la hinchada de Boca. Los visitantes, a la salida del partido contra Newell´s Old Boys donde los xeneizes fueron eliminados de la Copa Libertadores, habrían dado piedra libre a la violencia.

Desde el móvil de A Diario (Radio 2), el periodista Fernando Carrafiello informó sobre un paisaje adverso en las inmediaciones del estadio Marcelo Bielsa. La calle Pueyrredón, entre Montevideo y 9 de Julio, mostraba lo que el descontrol de la barra xeneize había provocado anoche: vidrieras rotas, autos apedreados, frentes de casas y edificios golpeados o escritos.

La avenida Pellegrini tampoco se salvó: los kioscos de revista desde Italia hasta Corrientes estaban arruinados con pintura.

Los comerciantes de la zona y algunos vecinos denunciaron que mientras se definía la serie copera por penales, no había uniformados en la calle. Menos a la salida de la hinchada auriaazul de la cancha. Incluso, una vendedora de Pueyrredón y Montevideo, aseguró que le habían anticipado la ausencia policial por lo que decidió bajar las persianas de su local.