El gobierno del Reino Unido estudia la aprobación de una nueva ley sobre cambio climático, una legislación que, según el gobierno, hará del país el primero en el mundo en tener un marco legal para el manejo y reducción de las emisiones de gases contaminantes.

El proyecto de ley, que debe ser previamente aprobado por el Parlamento, pretende reducir las emisiones de carbono en 60% para 2050. Ahora la tarea está en manos de una comisión independiente que hará el seguimiento de los planes y posteriormente informará al Parlamento sobre el progreso en el control de las emisiones.

El ministro de Economía y aspirante a jefe del Gobierno británico, Gordon Brown, propuso reducir las emisiones de carbono como principal medida para combatir el cambio climático.

En un discurso pronunciado en Londres, Brown presentó sus planes para hacer frente al calentamiento del planeta, un asunto que se ha convertido en caballo de batalla de los partidos en este país y que se perfila como el gran tema de litigio electoral. También el líder del Partido Conservador, David Cameron, detalló su propuesta, que pasa por fijar objetivos anuales de reducción de emisiones.

Las emisiones de carbono son consideradas, por muchos científicos, como la principal causa del calentamiento global. Medidas como aislar las paredes y hacer un consumo eficiente de energía -por ejemplo, apagando los aparatos eléctricos tras usarlos o empleando bombillas de bajo consumo- podría ahorrar a los hogares 5 libras a la semana (7,5 euros), al tiempo que las emisiones de este país de reducirían en cinco toneladas.