"En las últimas 24 horas hemos disparado cerca de 500 proyectiles de artillería, tanto desde tierra como desde el mar, siempre contra zonas deshabitadas y en las que revisamos con antelación que no hay población", dijo el portavoz militar del Ejército israelí a EFE. Consultado por la lógica militar de disparar contra descampados, el portavoz explicó que "las estadísticas indican que cuando disparamos contra esas zonas abiertas, desciende el número de cohetes que nos disparan". Hoy, bajo la lluvia de proyectiles israelíes, las milicias palestinas consiguieron disparar tres cohetes Kasam contra territorio de Israel, que no causaron daños ni víctimas. La fuente indicó que una parte de los proyectiles de artillería fueron disparados en el norte y otra parte en el sur de la franja, que el Ejército israelí ocupa desde que el miércoles de madrugada lanzase la operación "Lluvias de verano", tras el secuestro de uno de sus soldados dos días antes. También en el sur, milicianos palestinos dispararon esta tarde una granada antitanque contra un vehículo blindado israelí, que no sufrió daños, y con armas automáticas contra los soldados. En el norte, el Ejército prosiguió los ataques aéreos contra comandos palestinos, como el que hoy sacudió el barrio de Sayaíe, en la ciudad de Gaza. Según un parte del Ejército israelí, la Fuerza Aérea atacó de madrugada dos campos de entrenamiento de la milicia de Hamás, y otro de las Brigadas de Al-Aksa en los alrededores de Gaza capital, así como la oficina del ministro del Interior y una oficina de Hamás en el campo de refugiados de Yabalia. El Ejército negó categóricamente que la explosión que se produjo de madrugada en una planta eléctrica en el norte de Gaza, se debiera a uno de sus proyectiles o misiles. "El Ejército niega tajantemente las acusaciones palestinas de que hemos atacado un transformador en Gaza durante la noche", dice el parte militar. Y agrega: "la Fuerza Aérea identificó cada blanco atacado en el centro de la franja de Gaza, y puede confirmar que no destruyó ninguna planta eléctrica". El parte responsabiliza de la explosión y del apagón a un posible cohete Kasam que perdió su trayectoria y cayó en la planta. Mientras tanto, en Cisjordania, efectivos del Ejército israelí mataron hoy a dos milicianos palestinos en la ciudad cisjordana de Naplusa, ambos de las Brigadas de los Mártires de Al Aksa, afiliadas al movimiento Al-Fatah. Un tercer palestino, del brazo armado de la Yihad Islámica, falleció hoy en un hospital de Gaza como consecuencia de las heridas que sufrió hace dos días, al comenzar el Ejército israelí la "Operación lluvias de verano".