“Asumo personalmente toda la responsabilidad”. No estaba solo Daniel Filmus –lo acompañaba todo el gabinete nacional, además de su compañero de fórmula Carlos Heller y Aníbal Ibarra–, pero buscó hacerse cargo de la derrota kirchnerista y ahorrarle costos políticos al presidente. Y, como el resto de las voces del gobierno que hablaron este domingo, luego buscó suavizar la magnitud de la derrota: dijo que el 40 por ciento es el máximo de votos que el PJ ha obtenido en Capital Federal y muestra que un importantísimo porcentaje de porteños se pronunció “por un proyecto progresista y de profundización de los cambios iniciados en 2003”.
De todos modos, se ocupó de aclarar: “No cambiamos las convicciones; ningún resultado es satisfactorio si no podemos conducir ciudad de Buenos Aires. No somos una fuerza testimonial: somos una fuerza que gobierna el país y quería gobernar Buenos Aires”.
Luego saludó a “quienes han triunfado” –en ningún momento mencionó a Macri– y luego criticó: “Hubiéramos merecido el debate, pero no tuvimos la oportunidad”.
Para el final, agradeció al presidente Néstor Kirchner y a su esposa Cristina por “haber puesto el fecha” en momentos muy complicados de la campaña e insistió que el 40 por ciento de los votos “es también un punto de partida”.
Más temprano, con la derrota ya consumada, desde el oficialismo se buscaba mostrar una interpretación que hiciera menos duros los resultados para el gobierno nacional.