Matías Manna (*)
En el invierno de 2001 la visita a Rosario del entrenador holandés Louis Van Gaal pasó desapercibida. Ninguna entrevista registrada en ningún medio de comunicación y muy pocas personas (contando organizadores) presenciaron el partido que la selección de su país jugó en el estadio de Newell´s por el Mundial sub 20 realizado en Argentina.
Sobre la calle de un hotel céntrico rosarino, Van Gaal respondió brevemente unas preguntas antes de subirse al colectivo que lo trasladaba al parque Independencia: "Triángulos. Tu sistema es bueno si existen más triángulos, el balón circulará siempre más fácil”. Exclusiva de esta columna que sale a luz a más de once años.
Luego, sobre el campo de juego y durante la entrada en calor, los de camiseta naranja se pasaban la pelota y el trayecto de la misma siempre dibujaba diferentes triángulos. Sobre el estadio que hoy se llama Marcelo Bielsa (el entrenador rosarino reconoció que el modelo extranjero que más le gustaba era el Ajax de 1994-1995 conducido por Louis Van Gaal [1]) ese día, por ejemplo, ingresó en el complemento Arjen Robben (hoy jugador del Bayern Munich), con la 11, y potenció la victoria de Holanda sobre Angola.
Sobre el mismo césped, en el torneo pasado vimos muchos triángulos. Observen las posiciones de los jugadores de Newell´s y tracen imaginariamente triángulos. Se formarás muchos. Lo mejor, luego, será que la pelota muchas veces pasará por esas líneas.
Los triángulos son básicos para el juego que plantea Gerardo Martino. Si el rival logra romperlos, quebrará intenciones. Y ni hablar si falta el circuncentro. Al argumento de Van Gaal le sumamos un concepto de la geometría. Existe un punto llamado circuncentro que es el centro de la circunferencia que pasa por los tres vértices de un triángulo. Bernardi siempre es el circuncentro, un punto de apoyo geométrico que permite la circulación del balón leproso.
A Xavi lo denominamos así dentro de un artículo en el blog Paradigma Guardiola. Xavi juega de circuncentro, nuevo apodo del mediocampista del Barcelona que el periodista Fernando Palomo, relator del fútbol español en ESPN, rebautizó a partir de la lectura del artículo.
Frente a Independiente, faltó Bernardi y se ausentó el control predominante en el torneo inicial. Comprobarlo en nuestro artículo pasado “Bernardi o la referencia del estilo leproso”.
Sufrió por demás Newell´s por no poder dominar el partido. Quizás no haya un reemplazante de Bernardi no sólo en Rosario, sino en todo el fútbol argentino. Un mediocampista inteligente que pueda interpretar el juego y mediante su posición darle mejores condiciones a sus compañeros.
El partido se volcó al vértigo por la intensa lluvia y por el penal errado por Farías. Ahí Newell´s también tiene gente especialista como el ingresado Muñoz, también Vieyra o Hachen, o el mismo Maxi Rodríguez que a máxima velocidad desequilibran. El partido se volcó para ellos. No olvidemos que el mejor Maxi se vio en el Liverpool de Benítez, un equipo fabricado para la contra y para aprovechar los espacios rivales.
También ingresó Pablo Pérez y su gol le dará más confianza para todos los partidos que tendrá Newell´s. Nadie como él para pedirla entre la línea del mediocampo y la línea defensiva rival. Ahora también Newell´s puede ganar de otra forma. Pero no olvidemos. Se reconoce a partir del control y la quietud de su circuncentro.
Citas:
[1] SENOSIAIN, Ariel. “Lo suficientemente loco. Una biografía de Marcelo Bielsa”
El autor:
(*) Matías Manna (@matiasmanna) es autor del libro Paradigma Guardiola (Ara Llibres), creador del blog que lleva el mismo nombre. Entrenador de fútbol profesional y asesor e integrante de cuerpos técnicos de nivel internacional, nacional y regional. Egresado de la carrera de Posgrado Comunicación Digital Interactiva (Universidad Nacional de Rosario) – Licenciado en Periodismo (UNR). Docente universitario. Gestor de @ParadigmaPep, medio de comunicación rosarino con más seguidores en Twitter.


