El enviado especial de la ONU para Birmania (Myanmar), Ibrahim Gambari, aseguró que la Junta Militar de ese país asiático se "sorprendió" por la reacción internacional a su represión de las protestas pacíficas, lo que ha contribuido a su disposición a dialogar.
Gambari aseguró a la salida de una reunión del Consejo de Seguridad, donde les informó de su reciente viaje al país asiático, que la unidad de ese Consejo es clave para presionar a Birmania. "Creo que les tomó por sorpresa, y la reacción de la comunidad internacional fue muy clara y el mensaje que se me instruyó que transmitiera muy fuerte, así que es algo que tuvieron que tener en cuenta", dijo Gambari, que en su visita a Birmania se reunió con la cúpula birmana y con la líder opositora, Aung San Suu Kyi, en arresto domiciliario desde 2003.
El diplomático nigeriano confirmó que la Premio Nobel de la Paz está "también interesada" en la propuesta de diálogo "con condiciones" que ha planteado el máximo jefe de la Junta Militar, general Than Shwe. "Tenemos que ver si se puede lograr, que de verdad suceda. No se ha hablado en mucho tiempo y hay mucha desconfianza", apuntó.
Gambari comentó que en sus dos reuniones con la líder opositora, de 62 años, la vio mejor que en su última reunión el año pasado, a pesar del arresto domiciliario a que está sometida desde hace cuatro años. "Hay una oportunidad para un diálogo que tenga como meta la reconciliación nacional y una constitución que refleje la voluntad de la mayoría, además de un gobierno que responda a la necesidad de la gente. Eso es lo que Aung San Suu Kyi quiere de ese diálogo", insistió.
Sobre la reacción de los 15 miembros del Consejo de Seguridad a su informe, Gambari aseguró que hay un consenso de que el "status quo anterior es inaceptable e insostenible y probablemente no realista. No se puede regresar a la situación anterior a la crisis". Indicó que la Junta Militar birmana tiene que responder a las condiciones socio económicas del país, que atraviesa una crisis económica que ha producido un aumento de la pobreza.
Destacó la posición de la Asociación de Naciones del Sudeste de Asia (ASEAN), que desde un principio condenó la violenta represión ejercida por el régimen birmano la semana pasada contra las protestas multitudinarias que desde agosto llenaban las calles de las principales ciudades del país.
Gamabari, que tiene previsto realizar su cuarta visita a Rangún en noviembre, apuntó que el papel de China es "de importancia crítica" por la influencia que tiene sobre su vecino por sus lazos comerciales y políticos.
Fuente: EFE