A pocas horas de conocerse la creación de equipos especiales de fiscales y policías que intervengan en la investigación de los homicidios de Claudio “El Pájaro” Cantero y Diego Demarre, Marcelo Alomar y Nahuel César morían acribillados en una camioneta en Acevedo y Francia. Un vuelto a las claras que suma mayor violencia a la vivida durante el fin de semana en la ciudad. En ese sentido, el fiscal de Cámaras N° 1 de los Tribunales de Rosario, Guillermo Camporini, admitió que se complica la investigación de las redes delictivas porque existe un “código de silencio” y que a pesar de la información que circula en las calles, conseguir las pruebas que la respalde es sumamente complicado.

En diálogo con el programa Radiópolis (Radio 2), Camporini destacó la creación de grupos especiales de investigación pero marcó límites: “Se intentará esclarecer, no es una respuesta inmediata ni vamos a esclarecer todo. Hay entramados en estas redes delictivas, no es fácil, hay códigos de silencio entre esta gente, nadie ve nada, nadie quiere hablar y se complica todo”, se sinceró y agregó: “La ola de violencia está y esperemos que decrezca”.

Consultado acerca de las acusaciones que involucran al conocido como Pollo Bassi en el crimen de Ariel Canetero en Villa Gobernador Gálvez, Camporini observó: “Hay que tratar de evitar la dispersión de la información y saber de dónde vienen las protecciones, uno sabe por oídas pero nadie se anima a hacer alguna manifestación, los mismos familiares de las víctimas se sumen un código de silencio”, dijo.

Al respecto, ahondó: “Una cosa es lo que se dice y otra es probarlo, hay que tener cuidado porque se corre riesgo de no poder probar nada, es un gran dilema”. Luego, ante las preguntas de los periodistas Roberto Caferra y Guillermo Ghergo sobre la posibilidad de ordenar una declaración del mencionado como autor intelectual de los crímenes, respondió: “Es difícil hacer comparecer a ciertos personajes –indicó–. Si lo traigo puede parecer que hasta pierde protección pero si no tengo pruebas suficientes se lo termina fortaleciendo”, apuntó y remarcó: “El día que lo traiga es con pruebas suficientes para que no pueda salir en libertad”.

Sobre el accionar policial a través de los años en que estas denominadas bandas se han ido conformando, señaló: “Ha habido un momento de gran inoperancia pero hoy hay un compromiso diferente”, aclaró. Para terminar, aceptó que trabajar para el esclarecimiento de este tipo de hechos se puede volver peligroso: “Hay temor de lo que pueda venir colateralmente, hemos recibido comunicaciones extrañas, el temor siempre uno lo tiene, sobre todo a que puedan pegar donde duela mucho más”, sorprendió.