Damián Manso tiene ganas de volver a Newell’s. Y no tiene empacho en gritarlo a los cuatro vientos. “Chances de volver hay, ojalá se pueda. No pienso en la plata ni nada, quiero darle una mano al club”, dijo el Piojo, que visitó los estudios de Radio 2 y charló en el programa Zapping Sport.

“Hace un mes que estoy acá: estuve en Ecuador y Arabia y me vine a disfrutar de la familia. Rosario está hermosa, como siempre. Y a Newell’s lo seguía por Internet, hizo una buena campaña. Ojalá saque todos los puntos que quedan”, afirmó.

El zurdo admitió que la dirigencia y su representante “tienen que sentarse a charlar. A mí me gustaría mucho quedarme en Rosario y en el club donde me crié. Tengo otras propuestas del país, pero primero está Newell’s: después veremos”.

Manso comentó que está cansado de ser un trotamundos y prefiere instalarse definitvamente en su lugar: “Hace siete años que estoy viajando bastante y quiero quedarme, estuve en Ecuador, México, volví a Ecuador, ahora Arabia. Por eso quiero quedarme”, tiró.

"Este Newell´s juega muy bien: lo fui a ver y me gusta. Me encantaría jugar en ese equipo. Hoy prefiero jugar de doble cinco, para tener la pelota y distribuir el juego. Soy el mismo que vieron en Liga de Quito: a veces jugaba atrás del único punta. Pero prefiero ir de doble cinco", puntualizó.

Las experiencias de Arabia y Ecuador

“Fui con muchas expectativas: la ciudad es linda, pero las costumbres no la hacen tan linda. La estábamos llevando bien: me dirigía Maturana, se jugaron apenas seis partidos en seis meses por el tema de selección y las cuestiones religiosas y fue titular. Pero de repente, todo cambió”, señaló.

Manso narró: “A Maturana lo echaron después de una derrota y ahí empezó a cambiar todo en el club. Hubo un DT interino con el que no jugué, luego llegó otro entrenador y ya ni me concentró. Y al final corría solo alrededor de la cancha, así que rescindí y volví”.

Pero aclaró que “la rescisión se dio por motivos extrafutbolísticos, porque estoy muy bien”.

En Ecuador, en Liga, afirmó: "Bauza me trató muy bien, me supo llevar. Aunque eran de la contra (risas), tiramos siempre para el mismo lado. La pasé muy bien. Y hoy hay algunos equipos que me quieren llevar".