El Tribunal Oral Federal 2 de Córdoba ordenó la captura internacional del ex secretario de Transporte Ricardo Jaime. Es en el marco de la causa en la que será sometido a juicio oral a partir del 30 de julio por supuesta destrucción de prueba.

Jaime continúa prófugo, y este martes fue declarado rebelde por el juez federal Claudio Bonadío en la investigación por supuestas irregularidades y pago de sobreprecios en la contratación de obras para el ferrocarril Belgrano Cargas, en la que fue procesado con prisión preventiva.

En los próximos días, la Cámara Federal porteña deberá resolver si hace lugar o no a un pedido de eximición de prisión que ya fue rechazado por Bonadío al considerar la cantidad de causas que acumula Jaime y que puede fugarse o entorpecer la investigación.

Este miércoles, a pedido del fiscal de Córdoba Maximiliano Hairabedian, el tribunal oral que llevará adelante uno de los juicios orales contra Jaime, libró una orden de captura internacional a los efectos de que comparezca al proceso que comenzará el 30 de julio.

El fiscal federal de Cámara de Córdoba capital Maximiliano Hairabedian indicó que sobre el ex secretario de Transporte pende una causa por enrriquecimiento ilícito, agravada por tentativa de sustracción de pruebas durante un allanamiento.

En diálogo con el programa Radiópolis, que conduce Roberto Caferra por Radio 2, Hairabedian explicó que la imposibilidad de contactar a Jaime y la inminencia del juicio –el 30 de este mes– fue lo que motivó la orden de detención inmediata. Y así lo argumentó –destacó el fiscal– ante el Tribunal Oral. Esta causa la lleva adelante el fiscal federal de Buenos Aires Carlos Rívolo quien en su momento había comandado a una contadora a uno de los domicilios de Jaime en Córdoba para analizar una serie de documentaciones.

Hairabedian recordó que fue justamente durante la pesquisa contable, y en presencia de cuatro policías que el ex funcionario K había intentado robar los papeles requisados. “Los tomó del escritorio y se los puso en el bolsillo”, apuntó el fiscal, para quien sin embargo “lo peor de todo” es que a pesar de que los policías se dieron cuenta de la maniobra y la abortaron en el acto, los documentos “se perdieron igual ya en poder del Estado”.

Consultado sobre el “consejo profesional” de los abogados de Jaime, que le recomendaron permanecer prófugo, el fiscal cordobés explicó que ello “esta dentro de lo posible”: indicó que entre el abogado y su cliente está protegida por ley todo tipo de comunicación, con lo cual no es descabellado que sus defensores no quieran dar a conocer su paradero.

“Como con cualquier persona que es conocida, muchos dicen haberlo visto”, admitió Hairabedian aunque aclaró que la realidad es bien distinta: no se sabe dónde está el funcionario. De ahí –insistió– la justificación del pedido de “captura inmediata”.