Los comerciantes de las localidades cercanas a Rosario también expresaron su preocupación por los saqueos que se registran en distintos puntos del país. Es que, según expresaron, eso “alimenta el miedo de saber cuán lejos estamos de que nos toque una cosa así”.

El presidente del Centro Económico del Departamento Caseros, Hugo Racca, dijo en La primera de la tarde (Radio 2), que en Casilda y la zona “el clima es de calma este martes, aunque el lunes a la tarde hubo cierta incertidumbre. Muchos comerciantes decidieron cerrar los negocios y llevarse la mercadería a sus casas”.

“Los jefes policiales nos dijeron que estaba garantizada su actuación si se daban hechos de robos. Cumplieron, porque a la medianoche hubo intentos de romper vidrieras en un supermercado chino y en una casa de ropa deportiva y la policía llegó rápidamente”, contó.

Sobre este martes, señaló que la mayoría de los comercios abrió sus puertas, aunque advirtió que la gente está intranquila. “Uno ve lo que pasa en el resto del país y eso alimenta el miedo de saber cuán lejos estamos de que nos toque una cosa así”, consideró Racca.

En tanto, en Villa Gobernador Gálvez los comerciantes se mostraron “en alerta” y “con mucho miedo”.

En Capitán Bermúdez, Hugo Tombolini, propietario de una farmacia que fue robada este martes por dos sujetos que se desplazaban en moto, admitió que se trató de “un robo común” de los que están acostumbrados a vivir, al igual que otro producido en otra farmacia de la zona y un intento de robo en un súpermercado.

“Algunos comerciantes cerraron por miedo, pero después volvieron a abrir, porque no pasaba nada y la policía concurrió enseguida ante cada llamado”, afirmó el comerciante y señaló que alrededor de las 17 se realizará una reunión del Centro Económico de Capitán bermúdez, donde junto a afiliados y socios, evaluarán si toman alguna medida, aunque la situación estaba tranquila.

“En San Lorenzo, hubo algunos intentos de robo en comercios que fueron dispersados por la policía luego de responder a los llamados al 911”, explicó el gerente de la Cámara de Comercio e Industria de esa ciudad, Gabriel Abo, y agregó que “si bien hubo algunos vidrios rotos y corridas que motivaron a los comerciantes a no levantar las rejas de las ventanas o a poner vallados, “los comercios atendieron con normalidad”.