El presidente de Rosario Central, Pablo Scarabino, aseguró no estar al tanto de los embargos millonarios trabados sobre la institución vinculados a préstamos de ocho millones de dólares que el presidente junto a los dirigentes Gonzalo Estévez y Marcelo Gastaldi habrían concretado de manera irregular en septiembre de 2006.
"Puede que sera verdad, no tengo idea. Se han firmado tantas cosas para salvar a Central. Deberán contestar mis abogados", planteó Scarabino, quien sin embargo sostuvo que no recordaba específicamente haber firmado los préstamos a los que aludía la Justicia.
"Debe ser otra mentira más. Estoy en Buenos Aires, nadie me comunicó nada. Nos estamos preparando para terminar la negociación de Di María y Andrés Díaz. Evidentemente es un tema de la campaña esa que hay en contra de esta gestión que estamos haciendo", aseguró Scarabino, consultado por Luis Novaresio y Alejandro Cachari (en el programa Diez puntos, de Radio 2) sobre la situación del club de Arroyito.
El dirigente lamentó que este tema estuviera en la opinión pública "en lugar de estar contentos por la venta de jugador de tiempo récord, una transacción que saca a Central adelante después de mucho tiempo".
La jueza Liliana Giorgietti, que entiende en el proceso concursal del club, había citado a Scarabino este viernes a las once de la mañana a su despacho para aclarar los préstamos tomados. Pero el presidente canalla aseguró que no recibió información al respecto. "No recibí la citación", aclaró. "Me toma por sorpresa", planteó. "Lo consultaré con mi abogado gracias por avisarme", sostuvo.
"El tiempo lo dirá. Antes salía en los diarios que yo no volvía, que no encontraba documentos. Yo volví, encontramos los documentos, les pagamos cinco meses de deuda a jugadores y empelados. Que la gente de central vea la realidad", concluyó.
La palabra de Scarabino (Radio 2)
