Concluida la reunión entre los representantes de los taxistas y autoridades provinciales y municipales por la inseguridad que vive el sector –este domingo un chofer fue asesinado tras ser asaltado mientras cumplía con su turno–, los mismos choferes se sacaron chispas en las mismas escalinatas de la sede de Gobernación. A los gritos reclamaban soluciones e incluso uno de ellos habría amenazado con desenfundar un arma. El secretario general de los Peones de Taxi, Horacio Boix, aclaró que quien llevaba el revólver, no sería un miembro del sindicato. Sin embargo, no es la primera vez en la que las hay incidentes de este tipo en protestas de tacheros.
Según informó desde Santa Fe y Moreno el periodista Daniel Amoroso del móvil de De12a14 (El Tres), en la entrada del edificio se vivieron momentos de tensión este mediodía, poco después de que el ministro de Seguridad Raúl Lamberto y la intendenta Mónica Fein escucharan sus reclamos.
A la salida, los choferes le exigían a Boix soluciones desde el sindicato y sacaban a la luz, una vez más, las diferencias internas del sector.
“Estamos velando un compañero”, trató en un momento Boix, sin éxito, de calmar las aguas.
Además, los periodistas también fueron víctima de agresiones verbales.
