Los vecinos de la plaza San Martín se quejan de los olores que ha generado el campamento que la lleva una semana de la Corriente Clasista y Combativa.
Aunque al menos el hecho de que se hayan ido los carreros, y por lo tanto los caballos, alivió un poco la situación.
Sin embargo, algunos se encontraron con una sorpresa desagradable este martes a la mañana. Es que algunos autos que quedaron estacionados durante la noche en Dorrego al 600 amanecieron con un regalo: excrementos en vidrios y en las puertas.
Eso le paso, por ejemplo, a Hugo, que habló con Radio 2 y envió fotos a Rosario3.com. Hugo contó que un hueco que quedó al lado de un vallado en la puerta de la plaza cívica es usado como baño, algo que venían viendo en los últimos días, y esta vez la materia fecal, acaso por un juego, alguna broma entre los que allí hacían sus necesidades, llegó a los autos.
Aunque al menos el hecho de que se hayan ido los carreros, y por lo tanto los caballos, alivió un poco la situación.
Sin embargo, algunos se encontraron con una sorpresa desagradable este martes a la mañana. Es que algunos autos que quedaron estacionados durante la noche en Dorrego al 600 amanecieron con un regalo: excrementos en vidrios y en las puertas.
Eso le paso, por ejemplo, a Hugo, que habló con Radio 2 y envió fotos a Rosario3.com. Hugo contó que un hueco que quedó al lado de un vallado en la puerta de la plaza cívica es usado como baño, algo que venían viendo en los últimos días, y esta vez la materia fecal, acaso por un juego, alguna broma entre los que allí hacían sus necesidades, llegó a los autos.