El gobernador Jorge Obeid participó ayer junto al presidente Néstor Kirchner de la firma del Convenio Federal sobre Acciones en materia de Tránsito y Seguridad Vial, que fue rubricado entre el Estado nacional y las provincias y que busca, entre otros importantes puntos, unificar la legislación en todo el territorio argentino. El acuerdo incluye además la creación de un banco de datos nacional unificado de antecedentes de tránsito, lo que permitirá que en cualquier parte del país se puedan verificar los antecedentes del conductor, y un sistema de puntos que puede llevar hasta al retiro de la licencia a los infractores recurrentes. Esto se complementará con medidas de prevención como controles de alcoholemia en todas las rutas, prohibición de venta de alcohol a la vera del camino, control de la jornada laboral de los choferes de transporte, entre otras.
El acto se desarrolló en la Casa Rosada y del mismo participaron también los ministros del Interior y Educación, Aníbal Fernández y Daniel Filmus, respectivamente; la senadora Cristina Fernández de Kirchner; y los gobernadores del resto de las provincias argentinas.
Dicho convenio, que fue impulsado por familiares de víctimas de accidentes de tránsito, buscará, además de unificar la legislación, verificar que se respeten las normas viales, que la ley se ponga en práctica pero, fundamentalmente, que la misma se cumpla, y que sean las provincias las encargadas de hacerla cumplir.
El acuerdo compromete a provincias y municipios a la provisión de datos sobre antecedentes viales de cada jurisdicción.
Los puntos sobresalientes del acuerdo son, entre otros, el Registro Nacional de Licencias; la adopción del sistema unificado de puntajes; la extensión, intensificación y aplicación efectiva de los controles de alcoholemia; la prohibición de venta de bebidas alcohólicas en establecimientos junto a las rutas; la intensificación de los controles de velocidad máxima; el control de la jornada laboral; y el cumplimiento de descanso de los choferes de transportes públicos y de carga.
El mismo reunirá en un solo registro, en el Registro Nacional de Antecedentes de Tránsito (Renat), los antecedentes de tránsito, penales, faltas de tránsito, de manejo, etc., que estará a disposición de todos los municipios para su consulta.
Para su correcto funcionamiento, esta base de datos necesitará que cada municipio se comprometa a aportar los datos necesarios correspondientes para que la misma pueda ser creada y se mantenga actualizada.
Aquel municipio que no forme parte de la base de datos, no tendrá reconocidas sus licencias fuera de su propia jurisdicción ni a nivel nacional, por lo tanto, los dueños de las licencias estarán habilitados para conducir en cualquier ruta y ciudad de su país, dependiendo del municipio al que pertenezcan.
De esta manera, esta base de datos permitirá controlar y descartar aquellos usuarios para que, por cuestiones de antecedentes penales viales, no puedan retirar una licencia en ningún lugar del país.
Mientras tanto, para controlar a los conductores habilitados se utilizará el sistema unificado de puntajes: los poseedores de licencia partirán de un puntaje máximo del cual se irán descontando puntos a medida que cometa infracciones viales, cuyo puntaje estará relacionado con la gravedad del asunto. Cuando la licencia queda sin puntos deberá ser retirada y no podrá renovarla por un tiempo determinado o definitivamente.
El acto se desarrolló en la Casa Rosada y del mismo participaron también los ministros del Interior y Educación, Aníbal Fernández y Daniel Filmus, respectivamente; la senadora Cristina Fernández de Kirchner; y los gobernadores del resto de las provincias argentinas.
Dicho convenio, que fue impulsado por familiares de víctimas de accidentes de tránsito, buscará, además de unificar la legislación, verificar que se respeten las normas viales, que la ley se ponga en práctica pero, fundamentalmente, que la misma se cumpla, y que sean las provincias las encargadas de hacerla cumplir.
El acuerdo compromete a provincias y municipios a la provisión de datos sobre antecedentes viales de cada jurisdicción.
Los puntos sobresalientes del acuerdo son, entre otros, el Registro Nacional de Licencias; la adopción del sistema unificado de puntajes; la extensión, intensificación y aplicación efectiva de los controles de alcoholemia; la prohibición de venta de bebidas alcohólicas en establecimientos junto a las rutas; la intensificación de los controles de velocidad máxima; el control de la jornada laboral; y el cumplimiento de descanso de los choferes de transportes públicos y de carga.
El mismo reunirá en un solo registro, en el Registro Nacional de Antecedentes de Tránsito (Renat), los antecedentes de tránsito, penales, faltas de tránsito, de manejo, etc., que estará a disposición de todos los municipios para su consulta.
Para su correcto funcionamiento, esta base de datos necesitará que cada municipio se comprometa a aportar los datos necesarios correspondientes para que la misma pueda ser creada y se mantenga actualizada.
Aquel municipio que no forme parte de la base de datos, no tendrá reconocidas sus licencias fuera de su propia jurisdicción ni a nivel nacional, por lo tanto, los dueños de las licencias estarán habilitados para conducir en cualquier ruta y ciudad de su país, dependiendo del municipio al que pertenezcan.
De esta manera, esta base de datos permitirá controlar y descartar aquellos usuarios para que, por cuestiones de antecedentes penales viales, no puedan retirar una licencia en ningún lugar del país.
Mientras tanto, para controlar a los conductores habilitados se utilizará el sistema unificado de puntajes: los poseedores de licencia partirán de un puntaje máximo del cual se irán descontando puntos a medida que cometa infracciones viales, cuyo puntaje estará relacionado con la gravedad del asunto. Cuando la licencia queda sin puntos deberá ser retirada y no podrá renovarla por un tiempo determinado o definitivamente.