Una de cada cinco personas que padece tuberculosis en la región de las Américas no sabe que tiene la enfermedad, porque no accede a los servicios de salud o no está bien diagnosticada, según estimaciones de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Los registros indican que en 2012 se notificaron casi 220.000 casos y se estima que ocurrieron unas 19.000 muertes por tuberculosis en las Américas. En este sentido, hace referencia a la dimensión que adquiere esta situación que "no sólo pone en riesgo la vida de quienes padecen esta enfermedad, sino que también perpetúa la transmisión de la tuberculosis, y genera problemas socioeconómicos para la persona y sus comunidades". 

La directora de la OPS/OMS, Carissa F. Etienne, aseguró que "alcanzar el diagnóstico y el tratamiento para todos sólo puede lograrse si todos los proveedores de salud, las organizaciones comunitarias, los socios y los países unimos nuestros esfuerzos para detectar y tratar a esas 60 mil personas".

"El acceso universal -añadió- a servicios de salud de calidad a través de sistemas basados en la atención primaria de la salud, ayudará a reducir la carga de la tuberculosis y a asegurar una vida larga y productiva a la población de las Américas".

El estudio internacional da cuenta de que la carga de la tuberculosis varía según el país y se concentra en su mayoría en las poblaciones más vulnerables que viven en las grandes ciudades, en general en los barrios marginados.

Allí las condiciones de vida conllevan al hacinamiento, al acceso limitado a servicios de agua potable y saneamiento, y a las dificultades para acceder a servicios de salud.

El 80 por ciento de la población de América Latina y el Caribe vive en ciudades y uno de cada cuatro habitantes vive en la pobreza, recuerda la OPS/OMS.

Las estadísticas revelan que los países de las Américas disminuyeron en un 61 por ciento la prevalencia de la tuberculosis entre 1990 y 2012, y redujeron en un 68 por ciento la mortalidad por esta enfermedad en el mismo período.

Sin embargo, destacaron que en América Latina y el Caribe la tuberculosis aún sigue siendo una de las principales causas de muerte producida por un sólo agente infeccioso, conjuntamente con el virus de VIH/Sida.

Además de los casos no diagnosticados, otros desafíos son: la propagación de la tuberculosis multirresistente y la aparición de la tuberculosis extensamente resistente; y el aumento de personas con coinfección de tuberculosis y VIH/Sida, entre otros.

La tuberculosis es causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis, que afecta los pulmones con mayor frecuencia; y según la OPS/OMS una de cada tres personas en todo el mundo tiene tuberculosis latente, lo que significa que están infectadas pero no tienen ningún síntoma activo de la enfermedad y no pueden transmitirla.

La tuberculosis se transmite a través del aire cuando las personas afectadas por esta enfermedad tosen, estornudan o escupen.

El riesgo de que alguien infectado se enferme durante el transcurso de su vida es de un 10 por ciento, sin embargo, las personas con inmunodeficiencia, infección por el VIH, desnutrición o diabetes, o los consumidores de tabaco, alcohol y otras drogas fuertes tienen un riesgo mayor de enfermarse.

Los síntomas de tuberculosis pulmonar incluyen tos de más de dos a tres semanas de duración, adelgazamiento, fiebre, sudores nocturnos, inapetencia y tos con sangre.

Fuente: Telam