Hay un llamado que está al caer y que es lógico siempre y cuando Marcelo Bielsa esté sin trabajo. Sucede que, por lo que trascendió en las últimas horas, el Loco está a un paso de convertirse en entrenador del Olympique de Marsella.
Si la dirigencia sigue por el camino de los hombres vinculados a la historia del club, hay algunos ex campeones que se anotan rápidamente en el lista: Darío Franco, que actualmente está sin club, y Eduardo “Toto” Berizzo, que tiene contrato hasta mayo con el O´Higgings de Chile y lo quiere la Universidad Católica.
Un hombre con espalda, experiencia, títulos y personalidad es Ricardo Gareca, que descansa después de su gran paso por Vélez. De todos modos, es probable que el Tigre esté esperando una oportunidad del exterior, mucho más jugosa desde lo económico. De hecho, su nombre sonó en varias selecciones sudamericanas.
No sería descabellado pensar en Fernando Gamboa, un DT que funcionó bien en el Apertura 2008 y que tiene la personalidad suficiente como para hacerse cargo. Además, en aquella oportunidad su ayudante era Ricardo Lunari, el que este domingo se hará cargo como interino.
Algunos piensan en Martín Palermo, que tuvo un buen arranque como técnico de Godoy Cruz. El principal nexo lo establece Rolando Schiavi, ayudante del Loco, con buena relación con los referentes del plantel y con la mayoría de los directivos. Aquí hay un inconveniente relacionado a la rivalidad que existe en la ciudad: el Pato Abbondanzieri, ex arquero de Central, es el principal colaborador del ex nueve de Boca.
Una alternativa que la comisión directiva observaría con buenos ojos es que algunos de los jugadores que está en retirada, como los casos de Gabriel Heinze (ya anunció que deja el fútbol) o Lucas Bernardi (es técnico recibido), tome la riendas del equipo, sobre todo por su conocimiento del sistema futbolístico que llevó a la Lepra a ser campeón en 2013.
Los directivos primero consensuarán un perfil de DT, y luego irán por un nombre. Saben que cuentan con tiempo para designar al sucesor de Berti; pero también saben que no cuentan con margen de error.