El único detenido por la brutal balacera ocurrida en la tarde de este miércoles en Ayacucho entre Centeno y Doctor Riva, en el que murió un joven de 19 años y otro resultó gravemente herido, actualmente se encuentra en la cárcel de menores. De acuerdo a los indicios de la investigación, no está sospechado por haber sido el autor del ataque.

El sospechoso, de 17 años, fue aprehendido en la misma zona donde fue el crimen de Erik Díaz, y donde fueron heridos Lautaro Ronchi –jugador de las divisiones inferiores de Racing– y otro joven de 20 años que ya fue dado de alta. 

Los vecinos señalaron al adolescente como el hermano del que disparó contra las tres víctimas, quienes estaban sentadas en la vereda, según la información que recibió la División de Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal. 

Cuando la Policía identificó al menor le encontró un revólver calibre 32 y nueve municiones en uno de los bolsillos del pantalón. Fue por ese motivo que lo arrestaron y lo dejaron a disposición del Juzgado de Menores Nº 2.

El arma incautada no coincide con la utilizada para el homicidio de Erik Díaz, ya que peritos forenses hallaron en la escena del crimen seis vainas servidas calibre 9 milímetros.

En los primeros pasos de la investigación aún no hay una hipótesis clara sobre el motivo del feroz ataque.