La Secretaría de Trabajo  dictó la conciliación obligatoria, obligando a la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina (FTCIODyARA), conocida como "aceiteros", a levantar la huelga por tiempo indeterminado que había sido anunciada ayer para protestar por el tratamiento, mañana en el Senado, de la Ley Bases.

La medida fue solicitada por varias empresas del sector, incluyendo Cargill, Bunge Argentina SA, y COFCO Internacional SA, entre otras, junto con la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA).

La conciliación obligatoria incluye la fijación de una audiencia para el próximo 19 de junio. El sindicato exige la presencia del presidente Javier Milei, del ministro de Economía Luis Caputo, o de Federico Sturzenegger, coautor de la Ley Bases, junto a representantes de las empresas nacionales y multinacionales más poderosas. "Exigimos que allí se siente el presidente Javier Milei o su ministro de Economía, Luis Caputo, o -al menos- Federico Sturzzeneger, coautor de la Ley Bases junto a los estudios patronales de las empresas nacionales y multinacionales más poderosas", señala el comunicado.

El comunicado de la FTCIODyARA, emitido en respuesta a esta decisión, denuncia que el gobierno nacional, "conformado por empresarios y empleados a su servicio", busca cercenar el derecho a huelga y limitar la protesta contra la Ley Bases, que será tratada mañana en el Senado. La huelga, que debía comenzar esta medianoche, formaba parte de una serie de acciones contra el proyecto de Ley Ómnibus y la política económica del gobierno, que según el sindicato, perjudica a la clase trabajadora, a los sindicatos, a las organizaciones sociales y a los jubilados.

Los aceiteros criticaron duramente la medida de conciliación, calificándola de "coercitiva". Según el comunicado, "la única forma de limitar nuestra movilización es prohibir la huelga, que es la mejor herramienta para defender nuestros derechos".

La Ley Bases, considerada una reforma integral, incluye cambios laborales como la incorporación de la protesta sindical como causa de despido y la derogación de las indemnizaciones agravadas por trabajo no registrado. Además, el Paquete Fiscal adjunto a la ley reduce el impuesto a los Bienes Personales y reinstala la Cuarta Categoría del Impuesto al Salario, afectando a aproximadamente 1,1 millones de trabajadores.

En el comunicado, la FTCIODyARA reafirma su oposición a la Ley Bases y al Paquete Fiscal, argumentando que estas medidas "sólo favorecen a los sectores más concentrados y opulentos de la economía". El sindicato también acusa al gobierno de intentar destruir la industria nacional y liberar a los más ricos del pago de impuestos. "La política económica del gobierno nacional tiene como principal enemigo a la clase trabajadora", afirman los aceiteros, recordando la devaluación y liberación de precios de diciembre, que, según ellos, "licuó nuestros salarios y jubilaciones".

En este contexto, el sindicato hace un llamado a la Confederación General del Trabajo (CGT) para que convoque una nueva Huelga General y se profundicen las medidas de fuerza. La FTCIODyARA insiste en la necesidad de un plan de lucha más amplio para frenar las políticas del gobierno.