La esquina de Italia y Catamarca donde funciona el mítico bodegón y chopería Gorostarzu vuelve a abrir sus puertas tras permanecer cerrado un tiempo por reformas. La reapertura será este martes por la noche y si bien las modificaciones son estructurales aprovecharon el envión para renovarse con una apuesta fuerte en su carta. A sus clásicos y reconocidos carlitos, ahora le suman una versión vegetariana para aggiornarse y seguir conquistando paladares como desde hace casi un siglo.

Según describen sus propios dueños, la cocina “les había quedado chica”, frente a la gran demanda que venían experimentando tras la salida de la pandemia y eso fue lo que impulso a afrontar las remodelaciones. “Los cambios son funcionales y operativos en busca de dar un mayor confort a los clientes y a quienes trabajan acá. La idea es no perder vigencia manteniendo la esencia y la mística del lugar”, explica a Ecos365 Jorge Sauan, al frente del negocio desde 2003.

Las mejoras se focalizaron en la iluminación, la cocina, toda la línea de calor y los desagües. En el caso de la barra es completamente nueva y un cambio en los colores terminan de darle el toque de renovado. En lo que respecta a la carta, la gran novedad es la incorporación de una alternativa sin carne para el plato fuerte de la casa: el carlito. Vale remarcar que Gorostarzu además de tener la fama, tiene un su haber el primer puesto en el Campeonato Regional del Carlito en 2019.

El galardón hace honor a la receta que guardan con recelo. No obstante, es conocido que al clásico pan de miga lo conservan en bloque. En el momento que el cliente hace su pedido, le sacan la corteza con un cuchillo especial y lo cortan en fetas con la misma máquina para cortar el fiambre. Una vez cargado con todos los ingredientes va al horno y luego, directo a la mesa.

Asimismo el lugar cuenta con otro punto clave que lo hace perdurar en el tiempo desde 1928 además de sus platos típicos de bodegón. La tradición es servir el chopp de cerveza bien frio. Una costumbre que se cumple sin importar la época del año y que responde al sistema con el que expenden la bebida.

Con tantos años funcionando, el restaurante además de consagrarse como un emblema de la gastronomía local, es un ícono para Rosario, ya que muchos turistas y personalidades reconocidas del país lo eligen a la hora de visitar la ciudad. Fito Paez es uno de los artistas que siempre que viene tiene allí su parada obligada y lo comparte en sus redes sociales.

“Tratamos de mantener siempre la misma línea y ya nos estamos preparando para el evento que vamos hacer de los 95 años. Será a mediados de septiembre del año que viene para que el clima acompañe”, cierra Sauan.