Lionel Messi es un no-lugar. Tan universal que llega a cualquier rincón y recoveco del mundo y de las personas. Y así quedó demostrado con el presidente venezolano, Nicolás Maduro, que en un acto oficial de gobierno se mostró conmovido por la salida del rosario del Barcelona Fútbol Club, pero sobre todo por el trato que recibió del club catalán.

“Qué feo lo que le hicieron, yo lloré con él cuando lo vi llorando, lloré porque es un muchacho bueno, auténtico y una gran gloria deportiva del mundo. Lo que le hizo la directiva del Fútbol Club Barcelona no tiene nombre”, dijo durante el acto con los deportistas venezolanos que participaron en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

“Le dieron una patada”, lamentó. Maduro explicó que el cariño que le tiene a Messi lo aprendió de Diego Maradona; “Estoy seguro de que se va a sacar la espina y va a ser campeón de campeones en el nuevo equipo PSG”, auguró.

“Todo nuestro amor y solidaridad con las lágrimas de Messi. Ahora estamos felices porque lo vimos llegar a París. Estoy seguro de que se va a sacar la espina y va a ser campeón de campeones en el nuevo equipo PSG. Un aplauso a Messi desde aquí. Desde Venezuela, lo queremos”, aseguró.

Y opinó: “Si son capaces de hacerle eso a Messi, que es la mayor gloria del fútbol mundial, entonces son capaces de hacerlo con cualquier otro futbolista o persona. Lo utilizan, se hacen multimillonarios, hacen campaña durante años y, después, le dan una patada, que cosa tan triste”.