En su editorial del último martes, Viviana Canosa cuestionó los subsidios públicos que recibe la producción audiovisual que son canalizados a través del Incaa, entre otros organismos nacionales. Entre las series mencionadas está la ficción rosarina Maternidark, de la cineasta Romina Tamburello y la escritora Rosario Spina.

“Diez mil millones de pesos se gastaron en el Incaa para producir películas y series que no vio nadie”, lanzó Canosa que citó un relevamiento de la Fundación LED. El informe la "Distribución de Fondos Públicos al Sector Audiovisual" fue publicado por el diario Clarín esta semana.

La cifra responde al total de los subsidios a las producciones audiovisuales (películas, programas y series) del Incaa, Renacer Audiovisual y FoMeCA entre principios de 2020 y fines de 2022.

En el editorial “Argentina, una locura”, la periodista no sólo deslizó que se trata de “un gasto” que podría ser destinado a paliar “el hambre” sino que, con tono burlón –y sin conocimiento de las propuestas–, también arremetió contra las producciones alcanzadas por esos subsidios.

“Te digo los nombres de las series Nosotres; Piquete y qué: 20 años de protesta social; Trinchera de ideas, si no tienen una; El caso Echarri; L-Gante: la serie; Las manos de Perón; Obreres animades, ¿cómo?”, enumeró la conductora de A24.

Tras reiterar eso de “series y películas que nadie ve y nadie quiere ver”, se detuvo en Maternidark.

“¿Qué son, madres punk”? –continuó–. “Adoctrinar, adoctrinar; con el hambre que hay en la Argentina ustedes gastan diez mil millones de pesos. Ustedes no conectan con la realidad, no ven el bosque, ven un arbolito. Todos defienden sus cajas. Cuando les digamos «basta» les vamos a pegar una patada en el culo que van a salir volando por el aire”.

Consultada por Rosario3, la también dramaturga, actriz y escritora Romina Tamburello dijo que “la primera reacción fue reírme. No le doy mayor importancia una persona que lo único que busca es provocar. Es alguien que no camina los barrios, no patea las villas y no sabe lo que es el hambre”.

Maternidark está basada en una serie de escritos que la narradora Rosario Spina llevó adelante durante su embarazo en los que se exponen experiencias y percepciones que difieren (y discuten) la mirada plácida y “color de rosa” que se tiene de la gestación y el posparto.

Ambas están ultimando los detalles del guion compartido y supervisado por tutores del programa Renacer Audiovisual, que depende del Ministerio de Cultura de la Nación.

“En eso Canosa mintió porque dijo que las series ya estaban filmadas y no es así. Maternidark empieza a rodarse entre agosto y septiembre de este año, con actores y actrices de Rosario y Buenos Aires”, señaló Tamburello sobre la ficción conformada por seis capítulos que “tiene casi definida a su protagonista”

Sobre la afirmación “son películas y series que nadie quiere ver”, la directora de Rabia –el corto realizado por la productora rosarina Pez Cine que se exhibió en festivales de Cannes, México, Francia y Alemania, por citar solo los encuentros cinematográficos internacionales– cuestionó la generalización: “Es posible que a ella y las personas que conoce no les interesen, pero de ahí a decir «nadie»”.

La realizadora en cambió, adhirió con humor al planteo de Canosa sobre si la ficción “era sobre madres punk”: “Creo que hay que ser muy punk para gestar y traer una persona a este mundo”.

Por último, al ser consultada sobre su primera novela, La viuda del diablo, que recibió la primera mención del Premio Futurock Novela 2021, Tamburello contó que ya agotó la primera edición y que este domingo la presenta en la Feria del Libro de Buenos Aires.