Un joven de 18 años fue atacado a tiros este jueves a la noche en barrio Tablada y por la gravedad de las heridas se encontraba internado en el Hospital Provincial.

No es la primera que Fabricio Isaías “Momo” P. se debate entre la vida y la muerte. Inmerso desde la adolescencia en un torrente de violencia, en noviembre de 2021, cuando tenía apenas 15 años, sufrió un disparo en la cara que lo dejó varios días grave.

Según fuentes del caso, Momo P. recibió al menos dos disparos en Ayacucho y Centeno alrededor de las 21.30.

La Policía entrevistó a una familiar, quien dijo que el ataque se enmarcaría en un robo. El padre de Momo lo llevó de urgencia en un vehículo al Hospital Provincial, donde indicaron que tenía lesiones en el colon y la clavícula.

En la investigación interviene, hasta el momento, la comisaría 16ª, cuyo personal notificó el hecho al Ministerio Público de la Acusación. En principio, la causa recayó en la Unidad de Flagrancia, indicaron fuentes judiciales.

Investigadores consultados por Rosario3 indicaron que Momo estuvo mencionado en varios hechos de violencia, tanto como víctima y victimario.

En septiembre de 2019, F., una nena que no superaba el año de edad sufrió un disparo en Pasaje Iberia al bis, pleno barrio Tablada. Los tiratiros eran integrantes de la Banda de la Planchada, una gavilla que por esos días sonaba con frecuencia como mano de obra barata del delito, y el blanco que buscaban, se dijo, era Momo, que por entonces tenía 13 años.

Tiempo después, el 31 de diciembre de 2021, otra nenita sufrió otros disparo cuando la casa de Pasaje Iberia recibió una ráfaga de plomo. Por esos días, Momo se recuperaba de un tiro en la cara que recibió en Esmeralda y Deán Funes. Por ello, le quedó una cicatriz de una traqueotomía en el cuello. Los dos pistoleros mencionados como autores del ataque también llevan apodos conocidos, ligados al delito en Tablada y el barrio Fonavi: Cara de Burro y Cumpi.  

Lo último que tenían los investigadores sobre Momo, según pudo saber Rosario3, era su mención en una denuncia por usurpación, otra vez, en barrio Tablada, junto con los apodados Mosquito y Titi.