Dos familias rosarinas sufrieron la violencia de delincuentes que intentaron ingresar a sus domicilios en la noche del martes. Uno de los hechos sucedió en Alberdi, donde dos hombres armados apuntaron a una mujer que mientras guardaba su auto. El otro fue en barrio Azcuénaga: allí un joven forcejeó con los ladrones y recibió un disparo.

“Estaba entrando el auto, mi marido estaba dándole de comer a mi nena de 1 año, cuando estaba cerrando el portón, vienen dos personas y una se me abalanza con un arma, yo empecé a gritar, mi temor era que entren a la casa porque estaba mi nen. y no sabía que podía pasar”, contó en De 12 a 14 (El Tres), Érica.

Según el relato de la vecina de la zona norte de Rosario, al escuchar los gritos, salió su marido y el ladrón la tiró al piso y comenzó a apuntarle a él mientras insistía con ingresar al domicilio. “Mi temor era que entren, porque si entraban, podía ser un desastre, gracias a Dios salieron los vecinos, ellos tiraron todo y se escaparon”, sostuvo.

Algo similar sucedió en Camilo Aldao y Montevideo, barrio Azcuénaga, un joven regresaba a su domicilio y fue interceptado por delincuentes cuando intentaba ingresar con su bicicleta. “La idea era entrar, él tiró la bicicleta afuera, forcejeó con las dos personas, impidió que entren y cuando se da vuelta para cerrar el portón, ahí es cuando recibe el disparo”, detalló en El Tres Héctor, padre de la víctima.

El chico de 25 años fue hospitalizado pero ya recibió el alta debido a que la bala se alojó en el glúteo y no afectó ningún órgano. “Tiene puntos en la cabeza, está golpeado, le hicieron una tomografía que salió bien y la bala no es peligrosa, pero hay que esperar la evolución”, añadió el familiar.

En ambos casos, tanto los vecinos de zona norte como el padre del joven en barrio Azcuénaga, señalaron que los hechos de inseguridad son frecuentes en esos territorios. “Lo que le pasó a mi hijo, lo han vivido varios vecinos de la cuadra y de la zona. Todos los días y a toda hora”, aseguró Héctor.

Estos hechos se suman a lo que sucedió en barrio Belgrano donde cuatro delincuentes armados secuestraron a hombre, le sacaron la llave de su casa y le desvalijaron el domicilio en el que vive junto a sus padres de 85 y 82 años.