El avance de las compras online al exterior ya no es solo una tendencia de consumo sino un fenómeno con impacto directo en la economía real. Así lo expone el tercer informe del Observatorio de Importaciones de Apyme Santa Fe, titulado “Made in China”, que revela un salto del 237% en el ingreso de productos vía courier entre enero y octubre de 2025, con fuerte incidencia sobre la producción local, el empleo y la supervivencia de las pymes.
Según el reporte, actualizado a octubre de este año, las importaciones encuadradas en la categoría “Resto” –donde se incluyen plataformas como Shein y Temu– totalizaron USD 746 millones en diez meses, frente a USD 221 millones en el mismo período de 2024. El dato refleja el impacto de la desregulación del comercio sobre bienes finales que compiten de lleno con la industria nacional.
El informe, elaborado por equipos técnicos especializados, monitorea indicadores macroeconómicos, niveles de importación y su incidencia en 12 cadenas productivas clave para Santa Fe: automotriz, calzado, carnes, fideos secos, frutas y verduras, juguetes, lácteos, línea blanca, maquinaria agrícola, materiales para la construcción, muebles y textil.
China al frente y bienes finales en alza
Desde noviembre de 2023, las importaciones medidas en valor crecieron con China como principal motor: +66%. Le siguieron Brasil con +52% y el resto del mundo con +15%, mientras que Estados Unidos mostró una caída del 10%. Para Apyme, el peso del gigante asiático resulta central por su alta competitividad en precios y su capacidad para inundar el mercado con productos terminados.
La diferencia entre tipos de bienes también resulta clave. Comparadas con enero de 2024, las importaciones de bienes finales aumentaron 75%, mientras que las de bienes intermedios crecieron 44%. Mientras estos últimos pueden abaratar insumos y sostener la producción local, los primeros compiten de manera directa con productos fabricados en el país.
Una “avalancha” en sectores estratégicos
Las 12 cadenas productivas relevadas representan apenas el 10% de las cantidades importadas, pero concentran el 31% del valor total, lo que da cuenta de su peso estratégico. En ese universo, el crecimiento fue exponencial: el volumen importado en cantidades subió 104,3% entre noviembre de 2023 y octubre de 2025, frente a un aumento del 25,2% en las importaciones totales.
Los mayores saltos se dieron en muebles (+278,6%), línea blanca (+267,7%), fideos secos (+204,4%), maquinaria agrícola (+154,4%) y carnes (+148,3%). También se registraron incrementos significativos en materiales para la construcción, juguetes, automotriz, textil y calzado.
“En estas cadenas sí se verifica una avalancha importadora, aunque el agregado nacional la disimule”, advierte el informe.
Empleo en caída y pymes al límite
El impacto se refleja con claridad en el mercado laboral. Mientras el empleo registrado total en Santa Fe cayó 2,6% desde noviembre de 2023, en las cadenas analizadas la baja fue del 5,3%, más del doble. Las pérdidas más fuertes se dieron en maquinaria agrícola (–973 puestos), línea blanca (–932), automotriz (–747) y materiales para la construcción (–493).
El documento subraya que las mayores reducciones de personal se concentran en empresas grandes, mientras que las pymes hacen mayores esfuerzos para sostener el empleo ante la dificultad de capacitar mano de obra propia.
La contracara es el cierre de unidades productivas. En la provincia hay 2.224 empresas menos que en noviembre de 2023, un retroceso del 4,4%, de las cuales 260 son industriales. En las cadenas relevadas se perdieron 97 empresas y 93 de ellas son pymes de hasta 50 trabajadores.
Dos velocidades y un mismo resultado
Para Apyme, los datos muestran un patrón claro. La apertura y desregulación comercial impulsaron un crecimiento acelerado de importaciones de consumo, especialmente vía courier y con origen en China. El fenómeno avanza a dos velocidades: moderado en el total nacional, pero intenso en sectores industriales santafesinos.
El resultado, concluye el informe, es una fuerte correlación entre el aumento de importaciones, la pérdida de empleo industrial y el retroceso de pequeñas y medianas empresas, que enfrentan crecientes dificultades para sostener su actividad frente al ingreso masivo de productos importados.



