Esta temporada de verano será la más atípica de la historia, pero para no perder visitantes en la Costa Atlántica avisan que tanto alquileres como alojamientos tendrán un aumento del 30%, es decir, por debajo de la inflación. Pese a ello, algunos municipios -ávidos de dinero- cobrarán un impuesto al turista.
En Mar del Plata, el Colegio de Martilleros y Corredores Públicos sugirió ajustar un 30% interanual el valor de los alquileres de viviendas. De esta manera, en enero los departamentos de un ambiente (para dos o tres personas) costarán alrededor de $23.000 por quincena; los de de dos ambientes (para tres o cuatro) $29.500; los de tres ambientes (para cinco o seis) $35.500 y los chalés de tres ambientes desde $42.250.
En cuanto al alquiler de carpa, en Playa Grande y las del sur de la ciudad, una carpa durante enero saldrá $100 mil por mes, y $54 mil la quincena.
En Punta Mogotes en cambio, los precios son más atractivos, porque cobrarán $110 mil por una carpa para seis personas por toda la temporada, $70 mil para enero, $37 mil la quincena. También se ofrece un combo por diez días a $27 mil y por una semana a $20 mil, valores similares a los de la temporada pasada. Si se reserva antes del 31 de diciembre se obtiene un descuento del 50% a través del plan del Gobierno.
En Pinamar, el monoambiente más barato sale $45 mil, dos ambientes $65 mil y tres $80 mil. El alquiler por día de una carpa cuesta entre $2.500 y $3.500, mientras que por quincena varía entre los $25 y $35 mil. Alquiler de sombrilla varía entre $10 y $20 mil pesos, y algunos complejos de carpas piden entre $50 y $70 mil por 15 días. En Villa Gesell, la carpa arranca en $17 mil la quincena, pero muchos balnearios, cobran por persona y en el día.
Por otro lado, alquilar una casa en la costa atlántica puede salir entre $150 mil y $1 millón la quincena, dependiendo el lujo.
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