Nicolás Marilongo es rosarino, tiene 28 años y muchas ganas de ir para adelante con un proyecto que empezó como un emprendimiento y hoy se perfila como una empresa en crecimiento. Sucede que el joven detectó en unas vacaciones en Brasil un producto que lo fascinó. A su regreso, decidió renunciar a su trabajo de encargado en un shopping y enfocarse de lleno en crear Daddy Rolls, una marca propia que tiene como protagonista al helado tailandés.
“Me pareció interesante el producto, investigué bien de qué se trataba y al sacar números me decidí por importar las máquinas desde China para hacerlo posible”, cuenta Marilongo a Ecos365 y asegura que además de estudiar a fondo el negocio debió pedir ayuda para traducir los manuales y darle curso a la producción.
Vale destacar que la propuesta es vistosa no solo por el sabor y la variedad de materia prima. Es toda una experiencia ver cómo se prepara el producto final, ya que el cliente puede crear su propio helado siguiendo una serie de pasos: elige la base, dos sabores de los 12 que tiene para mezclar; elige una salsa y luego los toppings. “Tenemos la posibilidad de alcanzar unos mil sabores diferentes en el juego de las combinaciones y es un verdadero show ver cómo se hace”, destaca a este medio el titular de la firma.
Así fue como, con la pandemia de por medio, lo que empezó con un puesto en ferias públicas en Roldán y Funes hoy cuenta con dos puntos de venta en centros comerciales y está en vías de nuevas aperturas. No obstante, este año el impulsor de Daddy Rollls decidió apostar a una nueva etapa para dar un salto de calidad en el servicio y pasar de emprendedor a empresario. Con el objetivo de lograr captar nuevos públicos y meterse en el mundo corporativo Marilongo lanzó un sistema de franquicia low cost y servicio para eventos sociales y corporativos.
En lo que respecta al sistema de franquicias, se obtiene un modelo tipo góndola de 10m2 completo, 3 discos de ice cream rolls y materia prima para el primer mes. “Básicamente la llave se entrega en mano. Sólo se necesitan tres empleados. Entiendo que es una posibilidad accesible, donde el inversor no necesita atenderla personalmente pero además no hay desperdicio de ningún tipo de materia prima. Y lo mejor es que el producto es toda una novedad”, amplía su ideador.
En la actualidad, su trabajo diario es multitasking. No tan solo ideó la marca y el proceso comercial, sino que hoy es la persona a cargo de la firma, que se encarga de supervisar a empleados, funcionamiento de los locales, logística y planificación. La proyección para los próximos 5 años es “convertirse en una franquicia reconocida y tener nuevas propuestas de tipo de local para abarcar más el mercado”.
Desde sus inicios en 2021 encuentra a la marca trabajando en eventos. Si bien el primero fue en un cumpleaños de 15 de Funes, se fueron desarrollando todo tipo de encuentros. Por otro lado, en el segmento corporativo, el próximo desafío implica participar en un evento para 18 mil personas.
“El servicio es el mismo que tenemos en góndolas en puntos de venta. Esto mismo se adapta a cualquier tipo de evento y es para todo público. Tenemos tácticas que nos permiten hacer hasta 1500 helados single rolls por hora y la estructura se arma acorde el evento”, define Nicolás.
En pleno proceso de restylling de la imagen de marca, los planes en el corto plazo apuntan a posicionarse como líderes del mercado adolescente y joven con este producto innovador. Por eso se puede ver en las redes sociales, de manera gradual, la nueva imagen de Daddy Rolls. “Tengo muy buenas expectativas para lo que se viene”, anhela el rosarino.

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