El fiscal Federico Reynares Solari, quien el jueves pasado solicitó 15 años de prisión por narcotráfico para Alejandro Druetta, el ex jefe de Inteligencia de Drogas Peligrosas Zona Sur, aseguró que el ex alto mando policial no era cabecilla sino que respondía a una estructura superior.

En contacto con Radiópolis (Radio 2), el funcionario judicial explicó que la investigación que involucra a Druetta y a Juan "Tiburón" Delmastro –condenado como miembro de Los Monos– y el narco Ignacio Actis Caporale, alias "Ojito" –para ambos el fiscal pidió 12 años de prisión– se basa en hechos ocurridos entre 2008 y 2012. Durante este lapso, fueron organizadores del tráfico de estupefacientes de la región.

En el juicio, el narcotraficante apodado "Ojito" fue aceptado como imputado colaborador –conocido como "arrepentido"– por el Tribunal Oral Federal Nº 3 a cargo de los jueces Eugenio Martínez, Osvaldo Facciano y Roberto Vásquez. Declaró que, si bien es considerado líder de una organización dedicada a la venta de droga, siempre estuvo bajo órdenes de Druetta, por entonces un alto mando dentro de la fuerza de seguridad provincial.

“La maniobra que le reprochamos es que a cambio de datos y dinero permitía la impunidad de Actis Caporale, pero hay una estructura mucho más grande, acá no es solo Druetta”, sostuvo y remarcó: “Había estructuras en la Policía de Santa Fe, una regulación estatal del narcotráfico, dejar vender a unos y a otros no es una participación en el narcotráfico”.

“Esto no se le ocurre a Druetta y Delmastro, hay una estructura en la Policía de Santa Fe que participaba”, consideró y brindó ejemplos de la participación policial en la causa Los Monos y Hugo Tognoli, ex jefe de la Policía de Santa Fe.

Reynares Solari sostuvo que durante la investigación surgió la pregunta “por qué pasó esto?” y en este sentido, observó: “Faltaron providencias institucionales concretas, se analizaba la información separadamente” y agregó: “Faltaron parapetos institucionales que impidieras estas conductas”.

Luego, profundizó en relación a la intervención estatal en el delito de la venta de drogas: “El desafío de la Justicia Federal es conocer dónde va el dinero y quiénes usufructúan ese dinero, son personas que si son vistas por un ciudadano medio no se cruza de vereda. Hay que saber quiénes son los últimos beneficiarios de este esquema, hay que atacar la economía delictiva”, expresó.