Alan Aguerre: 6. Fue muy importante en los primeros 25 minutos del segundo tiempo, cuando Patronato apretó en base a pelotazos largos para tratar de empatar. Le sacó un gran remate a Rosales y otro a quemarropa a Tarragona.

Angelo Gabrielli: 5. Comenzó con algunas complicaciones por su sector pero se fue asentando y terminó sólido en la marca.

Cristian Lema: 6. Tomó algunas decisiones apresuradas y equivocadas, pero en general sostuvo la marca con solvencia y saco todo de arriba, como ya es su costumbre.

Santiago Gentiletti: 6. Además de su seguridad y tranquilidad defensiva, es el que aportó salida clara cuando pudo, en el marco de un partido muy trabado y deslucido.

Mariano Bíttolo: 6. Siempre se ofreció en salida por izquierda, apagó algunos incendios cuando a Newell's lo tomaron mal parados y lanzó el centro preciso para el gol de cabeza de Albertengo que resolvió el partido.

Julián Fernández: 6,5. Muy parejo durante todo el partido. Siempre estuvo bien ubicado y cuando salió a cortar o a relevar a los costados, nunca falló.

Aníbal Moreno: 5,5. Aportó dinámica en la mitad de la cancha y se animó a jugar, aunque no lo pudo sostener por largos ratos en el partido. Cumplió.

Denis Rodríguez: 4. Fue el más flojo del equipo, con poca intervención en el juego. Vale decir que el formato de partido, con muchos pelotazos largos, no lo benefició.

Lucas Albertengo: 6. Luchó más de lo que pudo jugar, pero tuvo su premio en el cabezazo que sentenció el partido.

Rodrigo Salinas: 6,5. Abrió el camino de la victoria con su corrida a puro optimismo y su muy buena definición por arriba del arquero Ibáñez. Ademas, aguantó muchos balones y colaboró en la pelota parada en contra

Maxi Rodríguez: 5. No tuvo muchas participaciones decisivas, pero cuando le dejaron un espacio, habilitó de maestro a Formica y le sirvió el tercer gol leproso.

Ingresaron:

Lucas Villarruel: 5,5. Entró para aportar orden en la mitad de la cancha y lo hizo bien.

Cristian Insaurralde: 4. Casi no tocó la pelota.

Mauro Formica: s/c. Jugó muy poco tiempo como para ser calificado, pero la primera pelota que tocó después de su lesión de rodilla, la mandó al fondo de la red.