Un robot capaz de desinfectar por completo superficies en cinco minutos y el aire en diez, eliminando incluso el coronavirus, fue una de las grandes revelaciones en la última edición del programa Naves Federal. El equipo que lo creó ahora trabaja en eliminar el joystick con el que se maneja y hacerlo autónomo, capaz de detectar y eludir obstáculos, así como también adaptarse al formato de las habitaciones.

El desarrollo fue nombrado Huayrabot, y si bien todavía se encuentra en fase de prototipo, dejó muy buenas impresiones iniciales. Cuenta con una base de 50 cm por 50 cm de tipo móvil, que con portalámparas alcanza los 1,8 metros de alto. Trabaja con rayos ultravioletas y está pensado para ambientes de alta transitabilidad, como consultorios o salones de clase. La desinfencción debe realizarse mientras no hay nadie presente en el lugar, más allá que de cualquier modo, el robot detecta si hay una persona y frena su proceso.

“Está diseñado con normas europeas, y creemos que una vez que desarrollemos la versión autónoma tendrá potencial para ser exportado”, dijo María Luisa Miranda, una las creadoras. La idea es que a la versión inicial se le sume opcionalmente inteligencia artificial para que Huayrabot sea capaz de transitar por los pasillos sin chocarse, tal como ocurre con las aspiradoras inteligentes, guardando el recorrido de cada lugar en una memoria interna. “A diferencia de las lámparas UV fijas, el hecho de que sea móvil nos permite cubrir con la misma lámpara más superficie”, agregó.

“La idea surgió en la pandemia, a raíz de la necesidad de desinfectar ambientes. Empezamos a investigar si era posible hacer móviles las lámparas y creamos este robot”, comentó a Ecos365 respecto a cómo surgió la propuesta, que además tiene un fin educativo con Huayrabot Education: “También hacemos kits para su armado pensados para escuelas técnicas, terciarios y universidades, que permite a los alumnos aprender y trabajar con robótica, mecánica, electricidad, electrónica”.

El concurso de Naves Federal le permitió al equipo capacitarse en el armado del plan de negocios, mientras se continúan haciendo ajustes y mejoras al prototipo. Una vez que tengan probadas las mejoras buscadas, saldrán al mercado a buscar financiamiento para su producción masiva.