Garbarino anunció que volverán a abrir los cuatro locales de Rosario que permanecían cerrados desde el fin de semana pasado, luego de una audiencia realizada en el Ministerio de Trabajo de la provincia, de la que tomaron parte, además, representantes del gremio mercantil y trabajadores.
El pasado sábado, la empresa había producido el cierre de las cuatro sucursales ubicadas en Córdoba al 1300, en el Shopping Alto Rosario (Junín al 500), en el Portal Rosario (Nansen 321) y en el Hiper Libertad (bulevar Oroño al 6000), generando incertidumbre y angustia entre los 56 empleados que posee la firma.
En su momento, la Asociación Empleados de Comercio había anunciado que la empresa había incurrido en un "lock out" patronal. Pero esta mañana logró destrabarse el conflicto. En la sede de la cartera laboral, el gremio solicitó el pago completo de los salarios adeudados del mes de marzo y que se efectivice un adelanto del salario correspondiente a abril.
Fuentes de Empleados de Comercio indicaron que el objetivo principal es el mantenimiento de las fuentes de trabajo evitando el cierre de los locales de la empresa.
En tanto, el secretario gremial, Juan Gómez, denunció que el cierre se trató de "una maniobra para poder pedir subsidios al Gobierno nacional poniendo como rehenes a los trabajadores".
La firma ya viene manteniendo un conflicto con sus empleados a nivel nacional por cierre de sucursales, despidos, suspensiones, deudas salariales y aportes patronales. A ese panorama no escaparon los 56 trabajadores de las sucursales rosarinas ubicadas en los shoppings Alto Rosario, Portal, Paseo Libertad y el local de Córdoba 1235, quienes en lo que va de este mes sólo cobraron 4.700 pesos de sueldo, un ingreso que no se ajusta a los términos de un acuerdo previo con la patronal que establecía el pago de los haberes en cuatro cuotas.
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