Poder Bifronte. Lo explica Natalio Botana con sus 85 años. Es Profesor Emérito de la Universidad Di Tella, Doctor de Ciencias Políticas y Sociales de Lovaina, profesor Honoris Causa de las Universidades de Salta, Rosario y Cuyo, miembro de la Academia Nacional de Historia. Acumuló premios, distinciones y reconocimientos y tiene en su haber innumerables ensayos sobre la Historia Política Argentina.
“Esto se puso feo y difícil. La historia es un claroscuro que va del blanco al negro. Hay un momento de oscuridad y otros más luminosos: este momento es grisáceo”, dice pausado Botana. “Jugamos peligrosamente sobre el filo dela navaja”. Sentenció antes de dar sus argumentos del filo, del juego y sobre todo de la empuñadura de esa navaja.
Después de una semana que devela una crisis inédita en los 40 años de continuidad democrática ahora le toca a un nuevo Mucamo ordenar el profundo desorden de una Argentina revuelta. Un Presidente sin poder presidencial, golpeado por el mismo Frente Político que lo llevó al Poder y ha decidido sin tibiezas desplazarlo pero “sin que se atreva a moverse del sillón”. A Alberto le quitaron “la lapicera del poder” y ahora se la “presta” a un Ministro con Capa de presunto héroe gestionador.
Sergio Massa diseña un programa económico, que presentará esta semana, al margen de las diferencias políticas entre Alberto Fernández y Cristina. Deberá estabilizar, contener la inflación, evitar los saltos del dólar y facilitar las exportaciones para fortalecer las reservas del Banco Central. El abc. Fácil decirlo, escribirlo o comunicarlo pero muy difícil hacerlo realidad.
Para Botana el conflicto de este tiempo es la mala conformación del Gobierno. “Dividieron el Poder Ejecutivo. Institucionalmente es un error. La historia marca que si bien el Poder Legislativo y Judicial debe ser colegiados, el Ejecutivo debe estar unido. Presidente y Ministros. Una autoridad firme que decida sin dudar. Y eso no pasó. Acá el Ejecutivo lo representa el Presidente pero mucho más la Vicepresidente, ambos con fuerza y eso (yo lo bautice) creo un poder bifronte”.
Ayer después del fuerte discurso del Campo en la Expo Rural de Palermo, el ahora presidente (corrección: Ministro) Massa habló con Nicolás Pino (presidente de la SRA) para decirle con claridad que no iba a devaluar la moneda. Dentro del plan Massa la idea es darle señales positivas al campo como no tocar retenciones.
“La conformación del Gobierno es riesgosa. No hay unificación en las decisiones, desgobierno, la inestabilidad asoma, cosa que sufrimos en las últimas semanas. Y esto no es un triunvirato. Antes la tensión era entre la Presidente y la Vicepresidente. Las tensiones seguirán. Si el Presidente pasa a cuartel de invierno, ahora el riesgo de la pelea será entre Massa y Cristina”, visualiza Natalio Botana desde Buenos Aires.
A pesar de las amenazas de estallido (Grabois y Aldo Rico, cada uno por su lado) la idea de contener la furia agrupa a la partidocracia argentina. En eso están de acuerdo. Alberto Fernández (o quien fuese) debe terminar el mandato en 2023.
“Una democracia sin alternativas es una democracia débil”, piensa y dice Natalio Botana. “Sabotaje? Es muy difícil pensar de este tipo de intenciones. Lo que hay que medir son las consecuencias no queridas de las decisiones que se adoptan. Eso hay que seguir”, dice.
Se espera que la máquina de fabricar billetes detenga su motor. Para eso hace falta que aumenten las exportaciones, ingresen dólares a un mercado sediento del verde billete norteamericano. Bajar el gasto público y eso no se hace simpáticamente con una población que no tendrá tolerancia alguna.
“En nuestro país, la economía ha sido tomada por la cultura política, como un conflicto entre facciones enemigas. Los otros países del Mercosur lo han entendido muy bien y han resuelto el dilema. O al menos intentado”, explica Botana
El volcán estalló, nos acostumbramos a caminar sobre lava hirviendo. Nuestro pies resisten eso. Sentimos alivio cuando el mundo muestra inflación, aumenta de l pobreza y crisis políticas y económicas en países firmes. Alivio tonto e inútil. Nuestros pies siguen enterrados en ese barro hirviendo que todo lo devora.
“Ahora el gran enigma es como hacer un país que retenga a sus jóvenes. A todos. Los mejores estudiantes e incluir en sus planes a los que les cuesta terminar el colegio. A la juventud hay que incentivarla con una buena oferta educativa. Hoy existe pero su acceso es para pocos. Esta coyuntura debe pensar cómo resolver eso”, piensa Botana.
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