Aumentos de la EPE: los créditos disponibles para comprar equipos industriales más eficientes

La actualización tarifaria, sumado a las exigencias de algunos mercados por contar con un sello verde, volvieron a poner a la eficiencia energética en el centro de la escena de empresarios

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El congelamiento tarifario y la crisis económica suscitada durante la pandemia desincentivaron en parte la reconversión energética que algunas pymes rosarinas habían empezado a transitar para ser más eficientes. Pero la actualización del costo del servicio, sumado a las crecientes exigencias de algunos mercados por contar con un sello verde volvieron a poner el tema en el centro de la escena. El problema ahora es el escaso financiamiento específico en la materia.

En el marco de un desayuno de trabajo que abordó el tema de eficiencia energética, varias empresas de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Rosario (AIM) vinculadas a la línea blanca indicaron que ya completaron un primer paso en ese sentido, y algunas incluso avanzaron en nuevas instancias que requieren de mayores inversiones. Pero coincidieron en que falta asistencia económica para ir más allá.

Desde Briket, plantearon que inicialmente cambiaron toda la luminaria por componentes led, con la cual ganaron en panorama visual, y también en ahorro energético. Luego sumaron equipos de medición consumo energético de cada maquinaria, y desde hace tiempo empezaron a considerar la eficiencia de cada una antes de comprarla.

En Plasticraft, firma proveedora de línea blanca, hicieron un relevamiento energético general y luego pasaron a hacer una optimización de equipos para reducir el consumo, comenzando con una renovación de maquinarias por otras más eficientes. “Son máquinas más compactas, con un mejor ciclo productivo y menor consumo, pero que tienen su costo, por lo que culminar el proceso nos puede demandar de cinco a diez años”, señalaron.

En los últimos años sumaron seis de estos equipos, cambiaron la luminaria y la bomba de agua, e hicieron una apuesta importante por paneles solares, la mayor parte con recursos propios. “En el mejor de los casos los programas del Gobierno te acercan $3 millones, que no es mucho para el costo que hoy tienen estos aparatos”, dijeron.

En Casermeiro, industria especializada en tornillos, pusieron un tablero que mide la calidad de la energía para corregir el factor de potencia, ya que venían pagando multas por exceso. “Trabajamos con una empresa para dimensionar el banco de capacitores, y las compras de maquinaria las hacemos considerando siempre el bajo consumo”, expresaron y apuntaron que el próximo paso es el de llevar la eficiencia a las máquinas de producción continua, la prensa, la laminadora, equipos en general más rústicos.

Por su parte, desde Metalúrgica Matienzo manifestaron que la eficiencia energética la trabajan a través del programa Sello Verde, en conjunto con la Secretaría de Vinculación Tecnológica de la Universidad Técnica Nacional (UTN), y con referentes de la Secretaría de Medio Ambiente de Rosario, aunque admitieron que con la pandemia el vínculo se enfrío. “Estamos viendo la posibilidad de aprovechar la energía solar para ser más eficientes, y para eso requerimos de un Aporte No Reintegrable (ANR), ya que sin ello nos sería imposible costear la inversión”, aseveraron. Otro pedido de los industriales rosarinos fue el de contar con una mayor capacidad de certificación en la materia en la región. “No entendemos por qué tenemos que recurrir a Buenos Aires para este trámite, si acá hay capacidad de sobra y entidades capaces de hacerlo”, sostuvieron.

Líneas de financiamiento verde

Actualmente casi por completo la asistencia a empresas en materia de eficiencia energética provienen del Gobierno nacional. Uno de los más recurridos es el Plan Pymes Verdes, que permite solicitar un ANR de hasta $ 1.500.000 para financiar hasta el 80% de la asistencia técnica de profesionales en Ecoinnovación y ecodiseño en las líneas de producción, en los productos, y en la comercialización; implementación y/o certificación de sistemas de gestión ambiental; implementación y/o certificación de sistemas de gestión de la energía; elaboración de planes de Adecuación Ambiental, en materia de efluentes, emisiones y residuos.

Además cuenta con un Programa Desarrollo Productivo PyME que otorga ANR de entre $3 millones y $ 40 millones para financiar hasta el 70% de proyectos de transformación productiva, priorizando proyectos de desarrollo sostenible y ecoinnovación. Se financian servicios de consultoría y asistencia técnica, adquisición de bienes de capital, equipamiento, instalaciones y puesta en marcha, ampliación de planta o modernización tecnológica, activos intangibles, y capital de trabajo incremental asociado al proyecto.

Por otro lado está el Financiamiento para la Adecuación Ambiental: una línea con el Banco Nación (BNA) para proyectos de hasta $50 millones con tasa de 18% a 5 años, para la adecuación ambiental de las PyMEs, con foco en las radicadas sobre cuencas hídricas consideradas críticas. Se financian proyectos de inversión que busquen el mejoramiento o implementación de buenas prácticas para la prevención y control de la contaminación mediante el tratamiento de efluentes líquidos y/o gaseosos, la optimización en el uso del agua y la gestión de los residuos. El destino del aporte debe ser el de adquisición de equipos, adecuación o construcción de instalaciones, implementación de sistemas de gestión ambiental, capital de trabajo asociado a la inversión (hasta un 20% del monto del crédito otorgado).

También existe un Programa de Desarrollo de Proveedores (Prodepro) que contempla a los fabricantes de equipamiento para la industria del reciclaje; equipamiento para el control de efluentes, emisiones y desechos; motores industriales de alta eficiencia energética. Ya se incluyen proveedores para energías renovables y movilidad. Ofrece asistencia técnica, una línea de créditos por hasta $200 millones y ANR de hasta $40 millones. Por otro lado está el Programa Soluciona Verde, apuntado a la economía del conocimiento aplicada en la materia, otorgando ANR por hasta $20 millones por el 90% del monto de los proyectos.

Un programa que se viene aplicando desde 2019 en Santa Fe a través del Consejo Federal de Inversiones (CFI) es el Programa de Eficiencia Energética, el cual prevé obtener ahorros económicos mediante una mejora en la gestión de la energía empleada en la prestación de servicios o en el desarrollo de procesos productivos. De esta forma, también se colabora con el medioambiente, reduciendo la cantidad de emisiones CO2 asociadas a la producción de energía. Los diagnósticos energéticos de empresas, financiados por el CFI, son realizados por los gestores capacitados en el marco del programa, e incluyen el relevamiento in situ para la obtención de datos de consumos, equipos, usos, eficiencias y propuestas de las mejoras en eficiencia energética detectadas, su costo estimado y el análisis financiero de las inversiones, para las cuales también se ofrece financiamiento.

En cuanto a la Provincia, el programa de Prosumidores pasó a ser el ERA (Energía Renovable para el Ambiente), que trabaja con Usuarios-Generadores. Se trata de aquellos que cuentan con instalaciones de generación eléctrica a partir de fuentes renovables conectadas a la red, pudiendo producir energía para auto consumo e inyectar el excedente a la red eléctrica, obteniendo un ahorro en la facturación.

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