La empresa especializada en equipos de frío, Arneg, desarrolló el único contenedor refrigerado del país a gran escala capaz de mantener la vacuna contra el coronavirus de Pfizer a -70°. Se produce en Rosario, tiene la capacidad de albergar miles de dosis de todos los laboratorios, cada a una a la temperatura requerida, y puede instalarse en toda la Argentina e incluso trasladarse a países de la región . Ya puso sobre aviso a las autoridades provinciales y nacionales para que, en caso de que cierren acuerdo con el laboratorio norteamericano, disponga de su uso.

Las vacunas Sputnik V y AtraZeneca necesitan mantenerse entre los -20° y -30°, algo no tan complejo de lograr con equipos de frío ya existentes. Sin embargo desde un comienzo las dudas estaban puestas en la de Pfizer, que requiere en forma constante de -70°, lo cual resulta más complejo. Fue por ello que tiempo atrás las autoridades organizaron una reunión con los principales fabricantes de frío para plantear este problema y buscarle una solución.

“Tomamos la iniciativa de pensar y preparar a la Argentina para la vacuna de Pfizer, si es que esa llegase, teniendo en cuenta que esta pandemia no terminará en forma inmediata y llevará varios meses el proceso de vacunación”, indicó Carlos Pasciullo, CEO de Arneg a Ecos365. Para eso diseñaron un prototipo de central de frío en cascada, el cual cuenta con una exclusa de 0°, una cámara de -30° (que se puede setear a otra temperatura) y luego un habitáculo con temperatura a -70°.

“Acceder directamente a una cámara a esa baja temperatura es imposible, pero en cambio hacerlo desde una de -30° te permite disponer rápidamente de la vacuna sin necesidad de un equipamiento especial. Además, el contenedor puede conservar otras dosis a distintos grados, y la exclusa a 0° puede usarse para colocar la vacuna”, explicó Pasciullo y agregó que este equipo tiene la particularidad de poder utilizarse en cualquier lugar de Argentina.

“Si bien hay pequeños freezers que llegan a esa temperatura de -70°, lo hacen con muy poco volumen. Con este desarrollo brindamos una capacidad aproximada de 20 mil litros a -70°, que traducido en dosis es un número muy grande”, detalló. A eso hay que sumar aquellas que pueden estar con menos frío.

Pasciullo indicó que el desarrollo lo hicieron en conjunto técnicos de la planta de Rosario junto a sus pares de la casa central en Italia, con quienes diseñaron la ingeniería en detalle del habitáculo y el análisis de los materiales a utilizar para soportar tanto frío. Además trabajaron con un sistema de backup para que se mantenga la refrigeración incluso si el equipo sufre alguna avería. “Todo está duplicado, y si hay un problema en el sistema primario, empieza a funcionar el secundario hasta tanto se soluciona la falla”, sostuvo. En caso de recibir el ok de las autoridades y disponer de todos los materiales, podrían producir tres centrales de frío por semana.

“Desde Arneg no pensamos esto como un negocio, porque de hecho no sabemos si esta vacuna llegará o no al país, sino que consideramos que es un aporte tecnológico que busca dar solución a un problema de salud pública. Es más que nada un tema de conciencia social, y por eso dejamos este desarrollo disponible a quien lo requiera en el mundo”, manifestó.

Además del mercado argentino, Arneg atiende desde el país al de Colombia, Chile, Perú y Uruguay, por lo que en caso de requerir estas cámaras, podrían fabricarse en Rosario y ser exportadas. Cabe resaltar que la empresa, una de las Destacadas del Año por Ecos365 por su inversión de u$s16 millones, ya venía trabajando con firmas de logística en soluciones para el transporte de vacunas, y había colaborado con la provincia para equipar hospitales y unidades de terapia intensiva.