La empresa de logística rosarina Binder SRL funciona desde 2007 y cuenta con dos depósitos fiscales y nacionales habilitados para cargas generales. Una de sus estructuras fue centrada en sumar operaciones y servicios logísticos a la industria láctea. En este sentido, la firma rubricó un contrato reciente con la multinacional Nestlé para la exportación de leche en polvo impulsando ampliar su infraestructura.
En este contexto, con una inversión de 1,5 millones de dólares desde Binder piensan sumar una nueva nave de 3.000 metros cuadrados y de 2.000 metros cuadrados más para la plazoleta fiscal a su unidad inicial. El espacio ubicado sobre la calle Favario, actualmente cuenta con una planta de 3.300 metros cuadrados, con 2.000 metros cuadrados más de plazoleta fiscal sobre un predio de 3 hectáreas.
“Esta inversión se da en Binder I, donde no trabajamos con lácteos pero por el aumento de las operaciones en Binder II traen como disparador que tengamos que ampliarnos para seguir abasteciendo a los clientes históricos”, explica a Ecos365 Nicolás Spengler y agrega que también prevé la incorporación de maquinaria, paneles solares entras otras medidas como política de sustentabilidad que este año los llevarán a certificar como empresa B.
Las obras ya se iniciaron y según confirmaron desde la empresa esperan tenerlo operativo entre abril y junio del año que viene. No obstante, en Binder II también tienen planificado invertir en la construcción de otras dos dársenas deprimidas, para la carga de los contenedores, con la intención de ampliar la plazoleta fiscal. Esta nave está en Av. Circunvalación y Uriburu, tiene cerca de 7.000 m2, emplazados sobre un predio de 7 hectáreas, con una plazoleta fiscal de más de 2.000 m2.
Un acuerdo con efecto multiplicador
La multinacional suiza Nestlé está entre los tres primeros exportadores de leche en polvo de Argentina y desde el 2017 convocó a Binder con el objetivo de consolidar sus exportaciones en ese segmento a nuevos mercados emergentes. El acuerdo firmado recientemente fue impulsado en el expertise de todos estos años y trae aparejado un beneficio a la región, dado que incrementa el volumen operado en la ciudad, sumando un estimado de mil contenedores por año.
Con la capacidad operativa actual que tiene Binder II, en un día se pueden descargar 25 camiones de leche en polvo, así como etiquetar 13 mil bolsas y cargar 25 contenedores por día. Por eso, en el caso de Nestlé terminaron invirtiendo en mayor capacidad de producción que en desarrollar toda esta logística.
“El acuerdo terminó empujando estas inversiones y es algo muy positivo para la plaza y de manera directa. Trae más trabajo de forma inmediata para transportistas, despachantes, agentes de transporte aduanero, para la Aduana, Senasa y ojalá que para el Puerto de Rosario”, detalla Spengler.
Para el titular de Binder el comercio exterior y la logística como industria en Rosario está en pleno crecimiento. Con más de 3.500 clientes, muchos de ellos multinacionales y con estándares de calidad, seguridad e higiene muy altos inevitablemente los obligan a subir la vara en cuanto a inversiones y a la operativa en sí misma. “Hoy Rosario ha crecido mucho en ese sentido y tiene mucho más por crecer”, afirma.
El recorrido en la industria láctea
La empresa de logística rosarina comenzó hace una década a trabajar con Milkaut, recibiendo la carga de leche líquida paletizada y almacenando particularmente en el verano que es el pico de producción y la merma del consumo. Vale destacar que las plantas no pueden parar de producir y necesitan tener una suerte de pulmón de almacenamiento, en algún depósito triple A, es decir que cumplan con ciertas características y esté habilitado como depósito de lácteos.
Eso disparó a que diferentes empresas del rubro como Tregar y La Sibila se fueran sumando y es así como descubrieron una oportunidad más que interesante para iniciar acciones comerciales en esa línea. Ubicados en Rosario, el corazón de la cuenca lechera con acceso rápido a las vías más importantes de la ciudad y al Puerto de Rosario los operadores lácteos producen, entregan en Binder y desde ahí se distribuye a todo el país.
Desde 2017, junto con Nestlé se abrieron al segmento de leche en polvo con operaciones de exportación que arrancaron de manera paulatina y ordenada y también se concretaron operaciones para Tregar, La Cristina, La Mucca entre otras empresas del rubro.
Con el paso del tiempo, incrementaron el volumen y la cantidad de operaciones donde no era solamente la recepción, el control, el almacenamiento y el eventual consolidado del contenedor, sino que se empezaron también a hacer retrabajos a la carga, como etiquetados, repalletizados, impresiones de bolsas, adaptación de pallets estándar a palletones y slip sheet, etc.
“La problemática que venimos a solucionar es para aquellos exportadores que entienden que podemos ser mucho más eficientes y por eso deciden desaprensarse de esas operaciones logísticas”, cierra Spengler.

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