Tony Janzen Valverde Victoriano, más conocido como "Pequeño J", quien fue detenido en Perú acusado de ser quien ideó y concretó los crímenes de Brenda Del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez, proviene de una familia donde la violencia y el crimen eran moneda corriente. Su padre le puso Tony, justamente por Tony Montana, el mafioso narco que Al Pacino interpretó en Caracortada, la película de 1983.
Según reconstruyó la agencia Noticias Argentinas, Janhzen Valverde Rodríguez pertenecía a la banda "Los injertos de Nuevo Jerusalén" y el 16 de diciembre de 2018 fue asesinado por un sicario de la banda "El Gran Marqués". Pequeño J tenía unos 13 años por ese entonces.
Además, Janhzen Valverde se hacía llamar Pablo Emilio Escobar, en referencia al narcotraficante, criminal, terrorista y político colombiano.
Meses antes de su crimen, el hombre expresó en su cuenta de Facebook: “Toda la vida bandido. Aproveche el día que amanece y agradezca a Dios y disfrute lo más que pueda porque no sabe si mañana estarás”. En dicha red social se observa al hombre con amigos y también con sus hijos.
Allí también solía postear videos con otras personas que serían miembros de su banda, portando armas largas como una carabina tipo AR-15 y pistolas trazadoras que suelen usar las fuerzas especiales militares, cuya munición atraviesa los chalecos antibalas.
De acuerdo a lo publicado por Página12, los archivos policiales, fiscales y judiciales peruanos no le adjudican ningún delito a Pequeño J, de hoy 20 años, pero sí miembros de su familia. En ese contexto creció el posible cerebro de uno de los crímenes narcos más crueles de Argentina, marcado a fuego, a su vez, por el narco crimen de su propio padre hace siete años.
