Un gobernador que no tiene una sucesión definida hasta una hora y media antes del cierre de listas. Una oposición imposibilitada de sintetizar las contradicciones e intereses con las que conviven los partidos y múltiples sectores que la integran. La centroizquierda atomizada en distintos proyectos electorales. La derecha local carece de identidad propia y tiene como todo objetivo capturar un puñado de bancas a fuerza de oportunismo, sea en clave pañuelo celeste o libertario. En Santa Fe, la marca de época es la ausencia de liderazgos.

El peronismo competirá con cuatro listas por la gobernación y varias más para diputados provinciales, dato que se conocerá mañana cuando las registre el Tribunal Electoral. Marcelo Lewandowski, Marcos Cleri, Eduardo Toniolli y Leandro Busatto se medirán en la primaria. La pregunta es ¿para qué? ¿Qué representa esa interna si no la ausencia de liderazgos?

Omar Perotti definió el candidato a la sucesión a las 22.30 del viernes, cuando el cierre era a las 24, tras una reunión cara a cara con Marcelo Lewandowski y después de haber mantenido a Roberto Mirabella toda la semana jugando a que era el precandidato de la Casa Gris. Perotti volvió a ser su verdugo, como en 2021. A última hora lo descartó de nuevo y las mentes creativas se dedicaron a diseñar memes en los que una pila de libros Defendamos Santa Fe con el que Mirabella hizo campaña ahora sirve para reemplazar la pata rota de una cama.

El diputado nacional presentó “Defendamos Santa Fe” en el centro cultural Plataforma Lavardén.

Perotti ejerce un liderazgo, pero es parcial y acotado. En la negociación con Lewandowski impuso sus tiempos y condiciones. Se quedó con la lista de diputados provinciales que va a encabezar él y que era su objetivo. Queda bien parado ya sea que el escenario para la gobernación sea de triunfo o derrota. Si es el primer caso, será socio de la victoria, le entregará la banda a otro peronista y podrá condicionarlo desde la Legislatura. Si es el segundo, querrá que la formula Lewandowski-Frana sean los padres de la derrota. Hay un tercer escenario posible: que el peronismo pierda tanto la gobernación como en Diputados. Si eso ocurriera, entonces todos habrán perdido y la película será otra. 

Lewandowski finalmente consiguió ser el candidato del gobierno. Gana en visibilidad e instalación. Si triunfa, será gobernador. Y si pierde y hace un buen papel podrá ocupar un espacio que está vacante en el peronismo santafesino. Perotti lo sabe, por eso hasta el mismo viernes su plan fue Mirabella, a pesar de los riesgos que corría de quedar pegado a la derrota. En política, siempre hay alguien para ocupar los espacios que no se ocupan.

Ahí va Lewandowski. Enfrenta una parada difícil porque ningún sondeo hoy da ganador al peronismo en Santa Fe. Era el candidato más competitivo del PJ y por eso el viernes estuvieron muy activos senadores y presidentes comunales para torcer la decisión de Perotti de llevar a Mirabella, porque entendían que les complicaba la estrategia en sus localidades y departamentos. Querían a Lewandowski, pero no querían pelearse con Perotti, porque hasta diciembre es el dueño de la caja provincial y en el medio hay una campaña, cada uno se juega el futuro.

Mirabella, Sacnun, Perotti y Lewandowski durante el lanzamiento de de la lista Celeste y Blanca (“Todos Hacemos Santa Fe”) junto a Roberto Mirabella y Perotti, en 2021. (Todos Hacemos Santa Fe)

El no perottismo

En este culebrón de suspenso que al final tuvo final feliz para él, el ex periodista deportivo tuvo como coprotagonista al ministro de Economía Sergio Massa. El ministro de Transporte Diego Giuliano fue su delegado y en la noche del viernes se movió de acá para allá con el senador.

Mientras se agarraba la cabeza por el 8,4% de inflación miraba de reojo el cierre de listas en Santa Fe. Massa, al menos eso espera Lewandowski, podría ser el garante de que Perotti le cumpla el acuerdo en relación a recursos económicos, acompañamiento y otros aspectos. ¿Perotti lo llevará de la mano o se concentrará en su suerte como candidato a diputado provincial?

Fuera de Massa no hubo otros referentes nacionales que jugaran activamente ni hicieran esfuerzos por ordenar el peronismo santafesino. En consecuencia, el espacio no perottista dividirá sus votos entre Marcos Cleri, Eduardo Toniolli y Leandro Busatto.                                    

El Movimiento Evita y el rossismo, los espacios más afines con protagonismo en el gobierno nacional, no pudieron sintetizar una propuesta común. No hace falta explicar la imposibilidad de un presidente sin futuro propio de influir en el futuro de otros.

Marcos Cleri, Leandro Busato y Eduardo Toniolli.

Cristina Fernández mantuvo hasta el final a Marcos Cleri. Fórmula propia de La Cámpora con Alejandra Obeid  y nombres que permiten ver la mano de los senadores del Nuevo Espacio Santafesino. Sobre el final, recogió en ambulancia a la vicegobernadora Alejandra Rodenas, a la que Perotti le cerró la puerta de su lista de diputados. Volverán a enfrentarse gobernador y vicegobernadora, esta vez sin terceros de por medio.

Hay una gran excepción en este escenario peronista y es Roberto Sukerman, quien finalmente será el candidato único del peronismo en Rosario. Fue persistente en el objetivo de sumar a Ciudad Futura a una interna como herramienta de fortalecimiento mutuo, y a la vez reunió respaldos sindicales, partidarios y de organizaciones.

Sukerman y Monteverde se anotan en la interna.

Una súper categoría

Mientras la categoría gobernador/a se caracteriza por una profunda renovación dirigencial y generacional, la categoría Diputados y Diputadas será altamente competitiva y atractiva. La marca en este proceso electoral es el volumen político de los protagonistas. Es casi seguro que en la próxima legislatura habrá dos ex gobernadores (Perotti y Antonio Bonfatti), la vicegobernadora actual, varios ex ministros tanto del Frente Progresista como del perottismo, un senador nacional (Scarpin, si asume), el ex intendente de Santa Fe José Corral y legisladores provinciales de trayectoria como Clara García, entre otros. La contracara será la Cámara alta, donde la búsqueda de la reelección es la regla común. Algunos van por más de dos décadas en la banca.

La muerte de Miguel Lifschitz en mayo de 2021 marcó el fin del último gran liderazgo en la política santafesina. A partir de ahí la oposición ensanchó sus márgenes y emprendió un largo proceso en el que las primarias del 16 de julio marcarán un primer corte. Los precandidatos a la gobernación o de las intendencias de las principales ciudades que logren pasar de pantalla tendrán la legitimidad para seguir construyendo ese liderazgo faltante que tantas dificultades trajo en este cierre de listas.

Así, el socialismo va a dirimir en primarias una vieja interna con dos listas que encabezarán Bonfatti y Clara García. La conducción partidaria sorprendió con una jugada de alto impacto al anunciar que García se bajada a la categoría diputada y Fein iba por la gobernación. Apuestan que si García ganase la primaria es la mejor para enfrentar al gobernador Perotti; del lado del ex gobernador y sus aliados explican algo que está a la vista: si la oferta era Fein gobernadora, García diputada, Verónica Irízar senadora y Enrique Estévez intendente, una porción del partido quedaba sin representación.

Clara García y Mónica Fein, las elegidas del PS. (Prensa PS)

Las intendencias del socialismo no quedaron al margen. Alberto Ricci, de Villa Gobernador Gálvez, jugará con Bonfatti en la categoría a diputado, sin perjuicio de que apoye a Fein a la gobernación. En tanto, el intendente de Santa Fe Emilio Jatón pidió prescindencia en la interna. El bonfattismo aceptó la idea, a diferencia de la conducción partidaria, que no le competirá a Jatón como intendente que va a la reelección, pero se sintió libre de plantarle listas para el Concejo municipal y la senaduría departamental. 

El socialismo va a dirimir en primarias una vieja interna con dos listas que encabezarán Bonfatti y Clara García. (V24)

Divisionismo como regla

El cierre de listas del PS pinta una postal elocuente del momento histórico: habrá dos socialistas al frente de la categoría diputados, dos para la categoría senador por Rosario (Miguel Cappiello y Verónica Irízar) y Santa Fe (Mariano Granato y Paco Garibaldi) y socialistas esparcidos en distintas listas de concejales: Federico Lifschitz en la línea del radical Maximiiano Pullaro; Susana Rueda en la de Bonfatti; Pablo Seghezzo en la Fein-García y Leonardo Caruana que tomó otro rumbo y encabezará la lista del Frente Amplio por la Soberanía, en sociedad co. el sector Bases y el diputado Carlos Del Frade. El socialismo pasó de partido a galaxia sin escalas.

Unidos para cambiar Santa Fe ya tiene dos apellidos fuertes para dirimir la interna. (Rosario3)

La debilidad de los liderazgos también profundizó divisiones en el PRO. Tendrá dos precandidaturas a la intendencia de Rosario entre Germana Figueroa Casas del sector aliado al radicalismo de Losada y Carlos Cardozo del macrismo puro. Ganancia para el intendente Pablo Javkin, que emprende la búsqueda de la reelección con números bajos, y por lo tanto la atomización de sus adversarios internos lo favorece. Javkin terminó haciendo un cierre de listas digno: preservó la banca de diputado provincial para su partido, el PRO y el socialismo van divididos en la ciudad y la alianza oficialista cubre todo el arco no peronista, lo que ayuda a evitar la fuga a otras propuestas. El misterio de esa interna es la candidatura de Miguel Tessandori. 

Cardozo y Figueroa Casas. (www.germanafigueroacasas.com.ar)

El radicalismo hasta aquí construyó la interna más previsible y ordenada, con dos grandes corrientes que llevan a Maximiliano Pullaro y Carolina Losada. El ex ministro de Seguridad sobre todo. A última hora le dio cobijo al PDP que se sintió traicionado por el otro sector y así evitó que Aldo Poy tuviera que tirarse de “palomita” a encabezar una lista propia. Los tironeos con Javkin por la lista de diputados y la guerra en el PRO enturbiaron el cierre por debajo de Losada.

Carolina Losada en carrera a la Casa Gris.

Pero lo que transcurrió de forma ordenada en la UCR, amenaza descalabrarse a partir de mañana. La interna de Unidos para Cambiar Santa Fe será un polvorín, con Carolina Losada y Mónica Fein protagonizando actos y declaraciones de impacto, buscando generar “conversaciones públicas” y polémicas. Perotti como blanco más a mano, pero también contra los adversarios internos. Losada debutó en campaña con duras críticas a Perotti, a Pullaro y dardos al socialismo. Fein a los dos primeros y al intendente Pablo Javkin. Ambas campañas tienen un mismo punto de inspiración que sostiene que en un contexto de tanta apatía a la política, el que pasa desapercibido pierde. Habrá que ver la reacción de Pullaro cuando las otras precandidatas insistan en subirlo al ring. De arranque se propone una campaña propositiva.

 La izquierda es la única por afuera del peronismo y de Unidos que presentó candidatos a gobernador. Hay ahí otro dato destacado que sobresale: es mucho más fácil presentar listas legislativas con la boleta única que financiar y hacer una campaña a gobernador.

La centroizquierda evidencia la ausencia de un proyecto que la convoque. Al caso del socialismo ya mencionado, se suma una agria dispersión. Ciudad Futura inicia una etapa novedosa y jugada, mientras que Carlos Del Frade y Rubén Giustiniani, referentes de bloques legislativo actuales, de nuevo irán con propuestas electorales separadas.

"Por fuera de la grieta y el pus": Del Frade y Giustiniani no lograron acordar.