Las autoridades de la Unidad Penitenciaria Nº 11 de Piñero habían ordenado reparar este lunes el tejido del alambrado por el que el domingo escaparon los internos de los cuales cinco permanecían prófugos.

Una recorrida realizada por el equipo periodístico del programa Telenoche Rosario (El Tres) a más de 24 horas de la fuga, captó imágenes aéreas del predio penitenciario y además se pudo observar la reparación del alambrado.

El tejido que fue cortado con una amoladora en la cinematográfica fuga ahora aparecía nuevamente unido con un hierro de manera provisoria ya que las autoridades provinciales anunciaron este lunes la construcción de un muro de protección, claro que en el más largo plazo.

Siguen las tareas de búsqueda tras la fuga de ocho presos de la cárcel de Piñero

Durante la jornada, fue recapturado Alejandro Antonio Schmittlein, de 40 años, cuando continuaba con la fuga a bordo de una camioneta Volkswagen Amarok de color blanco en un camino rural de la región, entre las localidades de Carmen y Murphy. Fue el tercer recapturado del escape de película que protagonizaron ocho internos este domingo.

Otros dos presos –Sergio Cañete y Joel Rojas– ya habían sido recapturados en el marco de una persecución en ruta 14 hasta Cabín 9. Estaban escondidos en el baúl de un auto.

La Policía continuaba con la intensa búsqueda de los otros cinco evadidos del penal.

El tejido reparado de manera provisoria (Imagen El Tres).

Los cinco que siguen prófugos

Claudio Javier "Morocho" Mansilla estaba siendo juzgado como autor del doble crimen de Leonel Bubacar (18) y Kevin Neri (16), ocurrido el 23 de septiembre de 2018 en Lima al 2100, en Villa Banana. La fiscal de Homicidios Doloso Marisol Fabro había pedido en el juicio (que empezó el 22 de junio y finalizaba el 30) una pena de 25 años de cárcel.

Tras su evasión, se armó un dispositivo en Lima al 2100 para proteger a las personas que declararon en el juicio por el doble crimen donde está acusado Mansilla.

"Morocho" es considerado por varios fiscales locales como líder de una banda de barrio Santa Lucía, de la zona oeste de Rosario. Fue imputado por el fiscal Gastón Ávila como presunto instigador del crimen de Mauricio Gómez, perpetrado el 26 de abril pasado en Colombia y French, en Fisherton Industrial.

También fue mencionado dentro de la investigación por el crimen de Iván Leguizamón, de 24 años, el 12 de septiembre del año pasado en Colombres y Calle 1709. Una de las hipótesis del homicidio fue una disputa territorial por la venta de estupefacientes. Y los supuestos gatilleros de Mansilla posteriormente atacaron también el cortejo fúnebre de Leguizamón en el cementerio La Piedad donde hirieron a un joven en la cabeza y en una pierna.

La pareja de Mansilla es Jésica González, con arresto domiciliario por causas en la Justicia provincial y federal por asociación ilícita y venta de droga, respectivamente. El domicilio de González de Capitán Bermúdez fue atacado de 40 tiros en enero pasado.

Alejandro Andrés Candia, de 35 años. Se fugó en mayo de 2019 junto a un grupo de reclusos de un convoy del Servicio Penitenciario en la autopista Rosario-Santa Fe, a la altura de Granadero Baigorria.

Candia tiene ingresos a la cárcel desde 2006. Cuenta con una condena a 10 años y 4 meses de prisión por robo calificado y por otra fuga, pero de 2017, de la unidad penitenciaria situada en el límite entre Rosario y la ciudad de Pérez.

Ezequiel Rodolfo Romero es otro de los buscados. Tiene 20 años y estaba detenido desde el 14 de mayo del año pasado por una causa por homicidio y lesiones.

Martín Cartelli, otro fugado, figura también con el nombre de Mateo Acevedo Flores. Es de San Nicolás, tiene 48 años y dos condenas: a 8 años y 9 meses; y a 4 años y 6 meses. También en sus antecedentes figuran delitos como robo calificado con arma de fuego; portación ilegítima de arma de fuego; robo poblado y en banda; secuestro coactivo; y lesiones.

Daniel David Piscione, de 31 años, quien fue condenado en mayo de 2015 a 8 años y 9 meses de prisión por robo calificado por uso de arma blanca y por portación de arma de fuego de guerra. Actualmente estaba en fase 1 de "tratamiento y promoción para la reinserción social".